Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase C
Potencia
163CV
Par
230Nm
Consumo
9.2l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
9.7s
Vel. Máx.
227km/h
Peso
1490kg
Precio
34,167€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 5v
RWD
5 / 4 puertas
455 L
62 L
120 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz C 200 K Berlina Aut. · 163 CV (2000-2002)
Descripción general
El Mercedes-Benz Clase C 200 K Berlina Aut. del año 2000 es un vehículo que encarna la esencia de la ingeniería alemana de principios de siglo. Con su motor de gasolina de 163 CV y una transmisión automática de 5 velocidades, este modelo prometía una experiencia de conducción refinada y confortable, ideal para quienes buscaban un equilibrio entre prestaciones y lujo en el segmento de las berlinas medias. Su diseño atemporal y la calidad de sus materiales lo posicionaron como una opción deseada en su momento.
Experiencia de conducción
Al volante del Clase C 200 K, la sensación predominante es de solidez y aplomo. El motor de 1.998 cc, con compresor e intercooler, entrega sus 163 CV de forma suave pero contundente, especialmente a partir de las 2.500 rpm, donde los 230 Nm de par motor se hacen notar. La aceleración de 0 a 100 km/h en 9.7 segundos y una velocidad máxima de 227 km/h, aunque no lo convierten en un deportivo puro, sí le otorgan la capacidad de moverse con agilidad en carretera. La suspensión, tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, junto con los estabilizadores en ambos ejes, proporciona un confort de marcha excelente, absorbiendo las irregularidades del terreno con maestría, sin sacrificar una buena estabilidad en curvas. La dirección de cremallera, aunque carece de la inmediatez de sistemas más modernos, ofrece una precisión adecuada para una conducción relajada. El consumo combinado de 9.2 l/100km, si bien no es el más bajo, era razonable para un motor de estas características en su época, especialmente considerando el peso de 1490 kg y la transmisión automática. En resumen, la experiencia de conducción es de un coche bien equilibrado, cómodo y con una respuesta mecánica satisfactoria para el día a día y viajes largos.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz Clase C 200 K Berlina Aut. del 2000 es un claro reflejo de la elegancia y sobriedad que caracterizaba a la marca en esa época. Sus líneas son clásicas y atemporales, con una silueta que denota distinción sin caer en estridencias. La carrocería berlina de cuatro puertas, con una longitud de 4526 mm y una anchura de 1728 mm, ofrece una presencia imponente pero proporcionada. Los faros delanteros, aunque no tan estilizados como los de modelos posteriores, cumplen su función estética y lumínica. El interior, con capacidad para cinco ocupantes, se caracteriza por la calidad de los materiales y un diseño funcional. El maletero de 455 litros es generoso y práctico para el uso familiar. En definitiva, un diseño que, a pesar de los años, sigue transmitiendo una imagen de coche bien hecho y con clase.
Tecnología y características
En el año 2000, el Mercedes-Benz Clase C 200 K Berlina Aut. incorporaba una tecnología avanzada para su segmento. Su motor de gasolina de 1.998 cc con inyección indirecta, compresor e intercooler era una muestra de la búsqueda de eficiencia y rendimiento. La transmisión automática de 5 velocidades ofrecía cambios suaves y contribuía al confort de marcha. En cuanto a la seguridad, aunque no se detallan los sistemas específicos, Mercedes-Benz ya era un referente en este campo, incorporando elementos como frenos de disco ventilados delanteros de 288 mm y discos traseros de 278 mm, que garantizaban una frenada eficaz. La suspensión independiente en ambos ejes, con estabilizadores, mejoraba la dinámica y la seguridad activa. Aunque carecía de las pantallas táctiles y la conectividad de los coches actuales, su tecnología se centraba en la mecánica y la seguridad pasiva, elementos cruciales para la experiencia de conducción de la época.
Competencia
En su momento, el Mercedes-Benz Clase C 200 K Berlina Aut. competía en un segmento muy reñido con rivales de la talla del BMW Serie 3 y el Audi A4. Estos modelos ofrecían propuestas similares en cuanto a lujo, prestaciones y calidad de construcción, cada uno con su propia filosofía de diseño y dinámica de conducción. El Clase C se distinguía por su enfoque en el confort y la suavidad de marcha, mientras que el BMW Serie 3 solía ser percibido como más deportivo y el Audi A4 destacaba por su tracción integral y su diseño más vanguardista. La elección entre ellos dependía en gran medida de las preferencias personales del comprador en cuanto a sensaciones al volante y estética.
Conclusión
El Mercedes-Benz Clase C 200 K Berlina Aut. del 2000 es un testimonio de la ingeniería automotriz de su tiempo. Ofrece una combinación de confort, rendimiento y elegancia que lo convirtió en una opción muy atractiva para quienes buscaban una berlina premium. Su motor con compresor, la transmisión automática y un chasis bien equilibrado proporcionaban una experiencia de conducción placentera y segura. Aunque los años han pasado y la tecnología ha avanzado, este modelo sigue siendo un ejemplo de la calidad y el buen hacer de Mercedes-Benz, un coche que, con el mantenimiento adecuado, aún puede ofrecer muchas satisfacciones a sus propietarios. Es un clásico moderno que representa una época dorada de la automoción alemana.




