Especificaciones y análisis del Mazda Mazda6
Potencia
179CV
Par
400Nm
Consumo
5.3l/100
Emisiones
141g/km
0-100 km/h
8.7s
Vel. Máx.
216km/h
Peso
1575kg
Precio
34,550€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
519 L
64 L
132 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mazda 6 Wagon Sportive 2.2 CRTD 180 CV (2011-2012)
Descripción general
El Mazda6 Wagon Sportive 2.2 CRTD de 180 CV, un modelo que vio la luz entre 2011 y 2012, se presenta como una opción familiar con un espíritu dinámico. Con un precio de 34.550 euros en su lanzamiento, este vehículo combinaba la versatilidad de una carrocería familiar con un motor diésel potente y eficiente, buscando conquistar a aquellos que no querían renunciar a las prestaciones por el espacio.
Experiencia de conducción
Al volante, el Mazda6 Wagon Sportive ofrece una experiencia de conducción gratificante. Su motor diésel de 179 CV, con un par motor de 400 Nm disponible desde las 1800 rpm, proporciona una respuesta enérgica y una aceleración de 0 a 100 km/h en 8.7 segundos, lo que permite adelantamientos seguros y una conducción ágil. La velocidad máxima de 216 km/h es más que suficiente para cualquier situación. La suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes, junto con las barras estabilizadoras, asegura un buen equilibrio entre confort y estabilidad, transmitiendo confianza en curvas. La dirección asistida eléctrica es precisa, aunque no excesivamente comunicativa. El consumo combinado de 5.3 l/100km es un punto fuerte, demostrando la eficiencia de su mecánica diésel. En general, es un coche que invita a disfrutar de la carretera, con un tacto de conducción que se siente más deportivo de lo que su carrocería familiar podría sugerir.
Diseño y estética
El diseño del Mazda6 Wagon Sportive es elegante y funcional. La carrocería familiar, con sus 4785 mm de longitud, 1795 mm de anchura y 1490 mm de altura, ofrece una silueta estilizada y proporcionada. Las llantas de 18 pulgadas con neumáticos 225/45 R18 le otorgan una presencia robusta y deportiva. El frontal, con sus faros afilados y la parrilla característica de Mazda de la época, le confiere una mirada decidida. La parte trasera, aunque más sobria, mantiene la coherencia estética. En el interior, el diseño es sobrio pero bien ejecutado, con materiales de calidad y una buena ergonomía. El maletero de 519 litros es amplio y versátil, ideal para las necesidades de una familia.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Mazda6 Wagon Sportive de 2011-2012 incorporaba lo que se esperaba de un vehículo de su segmento en aquel momento. Su motor 2.2 CRTD de 179 CV es un ejemplo de ingeniería diésel, con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, lo que le permitía cumplir con la normativa Euro 5 y ofrecer un consumo contenido. La transmisión manual de 6 velocidades es precisa y bien escalonada. Aunque no contaba con las últimas innovaciones en conectividad o asistentes a la conducción que vemos hoy en día, ofrecía un equipamiento completo para la seguridad y el confort, incluyendo frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, y una dirección asistida eléctrica. Su etiqueta DGT 'B' refleja su nivel de emisiones para la época.
Competencia
En su momento, el Mazda6 Wagon Sportive 2.2 CRTD de 180 CV se enfrentaba a una dura competencia en el segmento de las berlinas familiares diésel. Sus principales rivales incluían modelos como el Ford Mondeo Sportbreak, el Opel Insignia Sports Tourer, el Volkswagen Passat Variant, el Peugeot 508 SW y el Toyota Avensis Cross Sport. Frente a ellos, el Mazda6 destacaba por su equilibrio entre deportividad y confort, su diseño distintivo y la reputación de fiabilidad de la marca japonesa. Ofrecía una alternativa atractiva para quienes buscaban un coche familiar con un toque más dinámico y una mecánica diésel potente y eficiente.
Conclusión
El Mazda6 Wagon Sportive 2.2 CRTD de 180 CV fue un coche que supo combinar con acierto la funcionalidad de una carrocería familiar con un rendimiento dinámico y una estética atractiva. Su motor diésel ofrecía una respuesta contundente y un consumo razonable, mientras que su chasis proporcionaba una conducción equilibrada y placentera. Aunque el tiempo ha pasado y la tecnología ha avanzado, este modelo sigue siendo una opción interesante en el mercado de segunda mano para aquellos que valoran la fiabilidad, el espacio y un toque de deportividad en un coche familiar. Es un vehículo que, a pesar de los años, mantiene su esencia y su capacidad para satisfacer las necesidades de una familia activa.