Especificaciones y análisis del Mazda Mazda6
Potencia
120CV
Par
165Nm
Consumo
6.4l/100
Emisiones
152g/km
0-100 km/h
11.4s
Vel. Máx.
196km/h
Peso
1370kg
Precio
19,500€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 4 puertas
519 L
64 L
88 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mazda 6 4p Active 1.8 120 CV (2010-2012)
Descripción general
El Mazda 6 de 2010, en su versión 4 puertas Active 1.8 de 120 CV, se presenta como una berlina que busca el equilibrio entre la funcionalidad y un toque de distinción. Con un precio de 19.500 euros en su momento, este modelo se posicionaba como una opción interesante para quienes buscaban un coche familiar con un espíritu algo más dinámico que la media. Su motor de gasolina de 1.8 litros y 120 CV, asociado a una caja de cambios manual de 5 velocidades, prometía una conducción suave y eficiente para el día a día.
Experiencia de conducción
Al volante del Mazda 6, la sensación es de control y confort. La dirección asistida eléctrica ofrece una respuesta precisa, invitando a disfrutar de cada curva. Aunque sus 120 CV no lo convierten en un deportivo, la entrega de potencia es lineal y suficiente para la mayoría de situaciones, permitiendo adelantamientos seguros y una buena respuesta en carretera. La suspensión, con paralelogramo deformable tanto delante como detrás, filtra eficazmente las irregularidades del terreno, proporcionando un viaje placentero para todos los ocupantes. Es un coche que se siente aplomado y seguro, transmitiendo confianza al conductor.
Diseño y estética
El diseño del Mazda 6 de 2010 es elegante y atemporal. Sus líneas fluidas y su silueta aerodinámica le otorgan una presencia distinguida en la carretera. La versión de 4 puertas, con sus 4755 mm de longitud, ofrece una estampa imponente sin caer en excesos. Los detalles bien integrados, como los faros y la parrilla, contribuyen a una estética armoniosa. En el interior, la disposición de los elementos es intuitiva y los materiales, aunque no lujosos, transmiten una sensación de solidez y buen ajuste. Es un diseño que envejece con dignidad, manteniendo su atractivo a lo largo del tiempo.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Mazda 6 de 2010 ofrecía lo esperable para su segmento y año. Su motor de gasolina de 1.8 litros con inyección indirecta y 120 CV, aunque no era el más potente, destacaba por su fiabilidad y un consumo combinado de 6.4 l/100km, bastante razonable para la época. La transmisión manual de 5 velocidades, aunque podría parecer algo limitada en comparación con opciones más modernas, cumplía su función con suavidad. En cuanto a seguridad y confort, incorporaba elementos esenciales que garantizaban una experiencia de conducción segura y agradable, sin grandes alardes pero con todo lo necesario.
Competencia
En el competitivo segmento de las berlinas medias, el Mazda 6 de 2010 se enfrentaba a duros rivales como el Ford Mondeo, el Opel Insignia, el Volkswagen Passat o el Toyota Avensis. Frente a ellos, el Mazda 6 destacaba por su diseño distintivo, su buen comportamiento dinámico y una fiabilidad mecánica reconocida. Aunque quizás no ofrecía la misma variedad de motores o el mismo nivel de equipamiento tecnológico que algunos de sus competidores más premium, su relación calidad-precio y su enfoque en la experiencia de conducción lo convertían en una alternativa muy a tener en cuenta para aquellos que buscaban algo diferente.
Conclusión
El Mazda 6 de 2010, en su configuración 4 puertas Active 1.8 de 120 CV, es una berlina que ofrece una experiencia de conducción equilibrada y satisfactoria. Su diseño elegante, su confort de marcha y su probada fiabilidad lo convierten en una opción muy interesante para quienes buscan un coche familiar con un toque de distinción. Aunque no es un vehículo que destaque por prestaciones deportivas o por una tecnología de vanguardia, cumple con creces su cometido como compañero de viaje, ofreciendo un buen equilibrio entre rendimiento, consumo y placer al volante. Es un coche que, sin estridencias, sabe ganarse el aprecio de sus propietarios.