Especificaciones y análisis del Mazda CX-3
Potencia
121CV
Par
206Nm
Consumo
6.6l/100
Emisiones
149g/km
0-100 km/h
9s
Vel. Máx.
192km/h
Peso
1259kg
Precio
19,845€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
350 L
48 L
89 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mazda CX-3 Evolution Design 2.0 SKYACTIV-G 89 kW (121 CV) 2WD · 121 CV (2018-2020)
Descripción general
El Mazda CX-3 de 2018, en su versión Evolution Design con motor 2.0 SKYACTIV-G de 121 CV y tracción delantera, se presenta como una opción atractiva dentro del segmento de los SUV compactos. Este modelo busca combinar la practicidad de un crossover con el dinamismo y la elegancia que caracterizan a la marca japonesa. Su diseño, motorización y equipamiento lo posicionan como un vehículo pensado para quienes buscan una experiencia de conducción placentera y un estilo distintivo en su día a día.
Experiencia de conducción
Al volante del Mazda CX-3, la sensación es de agilidad y control. El motor de gasolina de 121 CV, aunque no es el más potente de su categoría, ofrece una respuesta lineal y suficiente para la mayoría de las situaciones, especialmente en entornos urbanos y carreteras secundarias. La caja de cambios manual de 6 velocidades es precisa y contribuye a una experiencia de conducción más conectada. La suspensión, con un esquema McPherson delante y eje torsional detrás, logra un buen equilibrio entre confort y firmeza, permitiendo disfrutar de las curvas sin sacrificar la comodidad en trayectos largos. La dirección asistida eléctrica es directa y comunicativa, lo que añade un plus de confianza al conducir. En general, el CX-3 transmite una sensación de coche bien aplomado y divertido de manejar, algo que Mazda siempre ha sabido imprimir en sus modelos.
Diseño y estética
El diseño del Mazda CX-3 es uno de sus puntos fuertes, siguiendo la filosofía 'Kodo - Alma del Movimiento' de la marca. Sus líneas fluidas y dinámicas le otorgan una presencia elegante y deportiva. La parrilla frontal, característica de Mazda, se integra armoniosamente con los faros afilados, creando una mirada distintiva. Las proporciones compactas, con una longitud de 4275 mm, una anchura de 1765 mm y una altura de 1535 mm, lo hacen manejable en ciudad sin renunciar a una estética robusta de SUV. Las llantas de 18 pulgadas con neumáticos 215/50 R18 complementan su imagen atlética. En el interior, el diseño es sobrio y funcional, con materiales de buena calidad y una disposición de los elementos que favorece la ergonomía. El maletero, con 350 litros, es adecuado para el uso diario, aunque puede quedarse algo justo para viajes largos con mucho equipaje.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Mazda CX-3 de 2018 incorpora elementos que mejoran tanto la seguridad como el confort. El motor 2.0 SKYACTIV-G es un ejemplo de la apuesta de Mazda por la eficiencia sin recurrir a la turboalimentación, con una alta relación de compresión de 14:1 y un sistema de inyección directa. Cuenta con Start-Stop, que contribuye a reducir el consumo y las emisiones en ciudad. Aunque no es un coche con una electrificación avanzada, su tecnología se centra en optimizar el rendimiento del motor de combustión. En cuanto a infoentretenimiento, ofrece lo necesario para una experiencia moderna, con conectividad y una interfaz intuitiva. Los sistemas de asistencia a la conducción, aunque no tan numerosos como en modelos más recientes, cumplen con las expectativas de seguridad de la época.
Competencia
El Mazda CX-3 compite en un segmento muy concurrido, enfrentándose a rivales como el Renault Captur, el Peugeot 2008, el Nissan Juke, el Honda HR-V o el Hyundai Kona. Frente a ellos, el CX-3 destaca por su diseño más distintivo y su enfoque en la dinámica de conducción. Mientras que algunos rivales pueden ofrecer más espacio interior o una mayor variedad de motorizaciones, el Mazda se posiciona como una opción para aquellos que valoran la estética, la calidad de acabados y una experiencia de manejo más gratificante. Su motor atmosférico de 121 CV, aunque menos potente que algunos turbo de la competencia, ofrece una entrega de potencia suave y progresiva que muchos conductores aprecian.
Conclusión
El Mazda CX-3 de 2018 es un SUV compacto que enamora por su diseño, su tacto de conducción y la calidad general de sus acabados. Es un coche ideal para quienes buscan un vehículo con personalidad, ágil en ciudad y capaz de ofrecer buenas sensaciones en carretera. Si bien su espacio interior y maletero no son los más generosos de su categoría, compensa con un estilo inconfundible y una fiabilidad mecánica que inspira confianza. Es una elección acertada para parejas o familias pequeñas que priorizan el diseño y el placer de conducir por encima de la máxima habitabilidad.