Land Rover Range Rover 2.0 Si4 PHEV 297 kW (404 CV) Vogue · 116 CV (2017-2018)

2018
Híbrido Enchufable
AWD
Automático 8v

Especificaciones y análisis del Land Rover Range Rover

Potencia

116CV

Par

-Nm

Consumo

2.8l/100

Emisiones

64g/km

0-100 km/h

6.8s

Vel. Máx.

220km/h

Peso

2209kg

Precio

121,300

Resumen técnico

Combustible

Híbrido Enchufable

Transmisión

Automático 8v

Tracción

AWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

446 L

Depósito

90 L

Potencia

85 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima116 CV / 85 kW
Par máximo0 Nm
Tipo de combustibleHíbrido Enchufable
TransmisiónAutomático 8v

Capacidades

Depósito90 L
Maletero446 L

Análisis detallado del Land Rover Range Rover 2.0 Si4 PHEV 297 kW (404 CV) Vogue · 116 CV (2017-2018)

Descripción general

El Land Rover Range Rover 2.0 Si4 PHEV de 2018 representa un hito en la historia del lujo automotriz, fusionando por primera vez la opulencia y capacidad todoterreno legendarias de la marca con la conciencia ecológica de la propulsión híbrida enchufable. Es el encuentro de dos mundos: la majestuosidad imponente de un Range Rover y el susurro silencioso de un futuro eléctrico, una declaración audaz de que el lujo no tiene por qué estar reñido con la sostenibilidad.

Experiencia de conducción

Conducir este Range Rover es una experiencia dual que acaricia los sentidos. En modo eléctrico, la sensación es de flotar sobre el asfalto en un silencio casi irreal, un oasis de calma que contrasta con su imponente presencia. La transición al motor de combustión es imperceptible, y cuando ambos corazones laten al unísono, la respuesta es un empuje contundente y refinado que mueve su considerable masa con una agilidad sorprendente. La suspensión neumática te aísla del mundo exterior, convirtiendo cada viaje en una travesía en primera clase, ya sea en la jungla urbana o en una autopista sin fin.

Diseño y estética

Su diseño es inconfundiblemente Range Rover: atemporal, aristocrático y poderoso. Esta generación refina las líneas icónicas con una mirada más afilada gracias a sus faros LED y una parrilla que impone respeto. Las proporciones son perfectas, transmitiendo una sensación de solidez y prestigio sin caer en la ostentación. El interior es un santuario de lujo artesanal, donde el cuero más fino, las maderas nobles y los metales pulidos crean una atmósfera de club privado. Cada interruptor, cada costura, cada superficie, todo está pensado para el deleite táctil y visual.

Tecnología y características

Este modelo supuso un salto tecnológico crucial para la marca. El sistema de infoentretenimiento Touch Pro Duo, con sus dos pantallas táctiles centrales, se convirtió en el protagonista de un salpicadero minimalista y futurista, ofreciendo un control casi total sobre las funciones del vehículo. El sistema híbrido, con su batería de 13.1 kWh, permitía una autonomía eléctrica real suficiente para los trayectos diarios, transformando la experiencia de conducción urbana y otorgando la codiciada etiqueta CERO. Era un escaparate tecnológico rodante.

Competencia

En el exclusivo club de los grandes SUV de lujo híbridos enchufables de su época, el Range Rover PHEV se medía con adversarios de gran calibre. El Porsche Cayenne E-Hybrid ofrecía un enfoque decididamente más deportivo y dinámico, atrayendo a quienes priorizaban las prestaciones puras. Por otro lado, el Volvo XC90 T8 se presentaba como una alternativa de lujo más discreto y familiar, con un fuerte énfasis en la seguridad y el diseño escandinavo. Más arriba en la escala de opulencia, el Bentley Bentayga Hybrid jugaba en una liga propia en cuanto a exclusividad y personalización.

Conclusión

El Range Rover P400e no fue simplemente una versión más, fue una declaración de intenciones y una audaz mirada al futuro. Demostró que la capacidad todoterreno extrema, el lujo superlativo y la eficiencia podían coexistir en un paquete extraordinariamente deseable. Ofrecía a su afortunado propietario lo mejor de dos mundos: la serenidad de los desplazamientos urbanos sin emisiones y la libertad sin límites de un gran turismo. Es una pieza de ingeniería visionaria envuelta en la más pura elegancia británica.