Especificaciones y análisis del Land Rover Freelander
Potencia
117CV
Par
160Nm
Consumo
10.4l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11.8s
Vel. Máx.
170km/h
Peso
1427kg
Precio
26,052€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
AWD
5 / 3 puertas
311 L
64 L
86 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Land Rover Freelander 4x4 3p 1.8i SE · 117 CV (2003-2005)
Descripción general
El Land Rover Freelander de 2004 en su versión de 3 puertas es mucho más que un simple SUV; es una declaración de intenciones. Representa la puerta de entrada al legendario mundo de Land Rover, encapsulando un espíritu de aventura y libertad en un formato más compacto y personal. Conducirlo es sentir la llamada de lo salvaje, incluso en el asfalto de la ciudad, un vehículo con un alma que trasciende su propia mecánica.
Experiencia de conducción
Al volante, el Freelander 1.8i ofrece una experiencia auténtica y conectada. Sus 117 caballos no buscan récords de velocidad, sino entregar la potencia de forma constante y fiable para superar obstáculos. La tracción total permanente inspira una confianza inmensa, haciéndote sentir capaz de llegar a cualquier parte. La suspensión absorbe las irregularidades con aplomo, brindando un confort sorprendente, mientras que la posición de conducción elevada te otorga un dominio visual del entorno que es pura esencia Land Rover.
Diseño y estética
Su diseño es icónico y atemporal. La carrocería de 3 puertas le confiere un aspecto juvenil y dinámico, casi como un coupé todoterreno. Cada línea, desde su frontal robusto hasta la característica rueda de repuesto colgada en el portón trasero, grita aventura. Es un coche con una personalidad arrolladora, un diseño honesto y funcional que ha envejecido con una dignidad admirable, evocando una nostalgia por la exploración y la robustez.
Tecnología y características
La tecnología del Freelander de esta época se centra en lo esencial para la aventura. No encontrarás grandes pantallas ni asistentes complejos, sino una ingeniería mecánica probada y eficaz. Su mayor baza tecnológica es el sistema de tracción integral permanente con control de descenso de pendientes, un pionero en su segmento que marcaba la diferencia fuera del asfalto. Es la tecnología de la vieja escuela: fiable, robusta y diseñada con un propósito claro.
Competencia
En su día, se enfrentó a duros competidores como el Toyota RAV4 o el Honda CR-V, que a menudo le superaban en fiabilidad y eficiencia en carretera. Sin embargo, ninguno de ellos podía igualar el carisma, el prestigio de la marca y, sobre todo, las capacidades todoterreno innatas del Freelander. Era la elección pasional frente a la lógica, para quien buscaba un auténtico 4x4 con pedigrí británico.
Conclusión
El Land Rover Freelander 3 puertas es un coche que se compra con el corazón. Es un compañero de aventuras imperfecto pero leal, que te recompensa con experiencias y una sensación de libertad que pocos vehículos modernos pueden igualar. A pesar de sus conocidos desafíos de mantenimiento, su encanto es tan potente que sigue siendo un objeto de deseo para los amantes de la conducción auténtica y el espíritu todoterreno.




