Especificaciones y análisis del Lancia Ypsilon
Potencia
80CV
Par
114Nm
Consumo
6l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
13.2s
Vel. Máx.
165km/h
Peso
1050kg
Precio
11,953€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
4 / 3 puertas
215 L
47 L
59 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Lancia Ypsilon 1.2 16V Argento · 80 CV (2003-2006)
Descripción general
El Lancia Ypsilon de 2003 no es un coche cualquiera, es una declaración de intenciones. En un mundo de utilitarios clónicos, este pequeño italiano irrumpió con una dosis de elegancia y distinción que solo Lancia sabe imprimir. Concebido para conquistar la ciudad con estilo, el Ypsilon es una joya que apela directamente al corazón, ofreciendo una experiencia de conducción diferente y un refugio de confort y buen gusto.
Experiencia de conducción
Al volante, el Ypsilon se siente ágil y ligero, un compañero perfecto para el caos urbano. Su motor de 1.2 litros y 80 caballos, aunque modesto en cifras, tiene el brío suficiente para moverse con soltura entre el tráfico. La dirección con asistencia eléctrica lo convierte en un juego de niños a la hora de aparcar. No busca sensaciones deportivas, sino ofrecer un viaje sereno y placentero. Es un coche que te invita a disfrutar del trayecto, sintiendo la ciudad de una manera más íntima y sofisticada.
Diseño y estética
El diseño es su alma. Cada línea del Lancia Ypsilon está pensada para seducir. Su carrocería de tres puertas, con formas suaves y redondeadas, la icónica calandra de Lancia y esos faros traseros elevados crean una silueta inconfundible y atemporal. Por dentro, la magia continúa con su característico cuadro de instrumentos central, una solución audaz que despeja la vista del conductor y convierte el habitáculo en un salón rodante. Es puro arte italiano en movimiento.
Tecnología y características
Para su época, el Ypsilon ofrecía soluciones ingeniosas centradas en el confort. La dirección asistida eléctrica, con una función 'City' que la hacía aún más suave a baja velocidad, era una bendición en maniobras. El motor, perteneciente a la fiable familia FIRE del grupo Fiat, era eficiente y robusto. Aunque no era un portento tecnológico, su equipamiento estaba enfocado en hacer la vida a bordo más fácil y agradable, priorizando siempre el bienestar sobre la ostentación.
Competencia
El Lancia Ypsilon no competía en la misma liga que los utilitarios generalistas. Su batalla era contra otros coches con un fuerte componente de diseño y personalidad, como el Mini de primera generación, el Volkswagen Polo con acabados superiores o el Citroën C3. Frente a ellos, el Ypsilon jugaba la carta de la exclusividad, el confort de marcha y un encanto italiano que era difícil de igualar.
Conclusión
El Lancia Ypsilon es una compra emocional, un capricho para quien valora la belleza y el estilo por encima de la pura funcionalidad. Es un coche con alma, que te hace sentir especial cada vez que te pones al volante. Representa una forma diferente de entender el automóvil urbano: no como una simple herramienta, sino como una extensión de tu personalidad. Una pequeña obra de arte que te acompaña en el día a día con una elegancia única.




