Especificaciones y análisis del Jaguar X-Type
Potencia
155CV
Par
360Nm
Consumo
6l/100
Emisiones
159g/km
0-100 km/h
8.9s
Vel. Máx.
220km/h
Peso
1502kg
Precio
36,900€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 4 puertas
452 L
62 L
114 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Jaguar X-Type 2.2D Executive · 155 CV (2005-2008)
Descripción general
El Jaguar X-Type 2.2D Executive de 2001 es una berlina que intentó llevar el lujo y la distinción de Jaguar a un segmento más accesible, combinando la elegancia británica con una mecánica diésel de origen Ford. Este modelo, en su versión Executive, prometía un equilibrio entre prestaciones, confort y un consumo contenido, buscando atraer a un público que valoraba la sofisticación sin renunciar a la eficiencia.
Experiencia de conducción
Al volante del X-Type 2.2D, la sensación es de solidez y aplomo. El motor diésel de 155 CV, aunque no es un prodigio de deportividad, ofrece una respuesta contundente desde bajas revoluciones gracias a sus 360 Nm de par, lo que facilita los adelantamientos y la conducción en carretera. La caja de cambios manual de seis velocidades es precisa y contribuye a una experiencia de conducción agradable. La suspensión, de tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, filtra bien las irregularidades del terreno, proporcionando un confort de marcha notable, aunque sin llegar a la suavidad extrema de otros modelos de la marca. La dirección, aunque no es la más comunicativa, cumple su función con corrección. En general, es un coche que invita a viajar con tranquilidad y disfrutar del trayecto.
Diseño y estética
El diseño del Jaguar X-Type es un claro homenaje a los modelos clásicos de la marca, con líneas elegantes y proporciones equilibradas. La parrilla frontal, los faros dobles y la silueta fluida evocan la tradición de Jaguar, aunque con un toque más moderno. En el interior, la versión Executive se distingue por sus acabados de calidad, con inserciones de madera y cuero que crean un ambiente acogedor y lujoso. El salpicadero es funcional y los controles están bien ubicados, aunque algunos elementos pueden parecer algo anticuados para los estándares actuales. A pesar de su tamaño compacto para una berlina, el espacio interior es suficiente para cinco ocupantes, y el maletero de 452 litros ofrece una buena capacidad de carga.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Jaguar X-Type 2.2D Executive de 2001, aunque no era un referente en innovación, incorporaba elementos que mejoraban la experiencia de conducción y el confort. El motor diésel de 2.2 litros, con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, era una muestra de eficiencia para su época. En cuanto a seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, así como sistemas de estabilidad y tracción. En el interior, se podían encontrar elementos como el climatizador automático, elevalunas eléctricos y un sistema de sonido de calidad, que contribuían a un viaje más placentero. La dirección asistida, aunque no era de las más avanzadas, facilitaba las maniobras.
Competencia
En su momento, el Jaguar X-Type 2.2D Executive se enfrentaba a duros competidores en el segmento de las berlinas premium, como el BMW Serie 3, el Mercedes-Benz Clase C y el Audi A4. Estos modelos ofrecían una propuesta similar en cuanto a lujo y prestaciones, aunque cada uno con su propia personalidad. El X-Type buscaba diferenciarse por su diseño más clásico y su enfoque en el confort, mientras que sus rivales alemanes solían destacar por su dinamismo y tecnología más vanguardista. La elección entre ellos dependía en gran medida de las preferencias personales del comprador.
Conclusión
El Jaguar X-Type 2.2D Executive es una berlina que, a pesar de sus años, sigue ofreciendo una experiencia de conducción agradable y un nivel de confort notable. Su diseño atemporal y sus acabados de calidad lo convierten en una opción interesante para quienes buscan un coche con personalidad y un toque de distinción. Si bien no es el más deportivo ni el más tecnológico de su segmento, su equilibrio entre prestaciones, consumo y confort lo hacen un compañero de viaje muy digno. Es un coche que, con un mantenimiento adecuado, puede seguir brindando muchas satisfacciones.