Jaguar F-Type SVR Coupé · 575 CV (2016-2017)

2014
Gasolina
AWD
Automático 8v
Jaguar F-Type - Vista 1
Jaguar F-Type - Vista 2
Jaguar F-Type - Vista 3
Jaguar F-Type - Vista 4

Especificaciones y análisis del Jaguar F-Type

Potencia

575CV

Par

700Nm

Consumo

11.3l/100

Emisiones

269g/km

0-100 km/h

3.7s

Vel. Máx.

322km/h

Peso

1705kg

Precio

158,600

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 8v

Tracción

AWD

Plazas

2 / 3 puertas

Maletero

310 L

Depósito

70 L

Potencia

423 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima575 CV / 423 kW
Par máximo700 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 8v

Capacidades

Depósito70 L
Maletero310 L

Análisis detallado del Jaguar F-Type SVR Coupé · 575 CV (2016-2017)

Descripción general

El Jaguar F-Type SVR Coupé no es simplemente un coche, es la máxima expresión de la ferocidad y la belleza británica. Nacido de la división Special Vehicle Operations de Jaguar, este felino representa la cúspide de la gama F-Type, un deportivo diseñado para despertar emociones puras y ofrecer una experiencia de conducción visceral e inolvidable, impulsado por el corazón de un V8 sobrealimentado que ruge con una furia espectacular.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del F-Type SVR es desatar una tormenta. Cada pisotón al acelerador es una explosión de sonido y fuerza que te aplasta contra el asiento, con el compresor aullando y el escape de titanio crepitando en una sinfonía adictiva y brutal. La aceleración de 0 a 100 km/h en 3.7 segundos se siente instantánea, y su velocidad máxima de 322 km/h es un testamento de su poderío. La tracción total te da una confianza inmensa para devorar curvas, pero nunca olvida su alma de propulsión trasera, permitiendo que la zaga se insinúe con alegría. Es una experiencia sensorial abrumadora, un diálogo constante entre el hombre y una máquina salvaje que exige respeto y recompensa con adrenalina pura.

Diseño y estética

Visualmente, el F-Type SVR es una obra de arte agresiva. Mantiene las líneas fluidas y sensuales que hicieron del F-Type un clásico instantáneo, pero las adereza con elementos que gritan rendimiento. El alerón trasero activo de fibra de carbono, las tomas de aire ampliadas en el parachoques delantero y las llantas forjadas de 20 pulgadas no son solo adornos; son una declaración de intenciones. Es un diseño que combina la elegancia felina de Jaguar con la musculatura de un atleta de élite, atrayendo miradas de admiración y respeto a partes iguales.

Tecnología y características

La tecnología en el SVR está al servicio de las prestaciones. El protagonista es el motor V8 de 5.0 litros con compresor, que entrega 575 CV y 700 Nm de par. Se asocia a una transmisión automática de 8 velocidades recalibrada para cambios fulgurantes y a un sistema de tracción total inteligente que prioriza el eje trasero para mantener un carácter juguetón. La suspensión adaptativa, los frenos de alto rendimiento (con opción a carbocerámicos) y el diferencial electrónico activo trabajan en conjunto para domar a la bestia sin castrar su espíritu. Aunque su sistema de infoentretenimiento no era el más avanzado de su época, la verdadera tecnología aquí es la que te conecta con el asfalto.

Competencia

En el exclusivo club de los superdeportivos, el F-Type SVR se enfrentó a titanes como el Porsche 911 Turbo, el Mercedes-AMG GT S o el Audi R8 V10. Mientras que sus rivales alemanes a menudo presumen de una precisión casi quirúrgica y tecnologías más vanguardistas en el interior, el Jaguar contraataca con un arma infalible: el carácter. Ninguno de ellos puede igualar su estruendoso drama sonoro ni su alma de 'muscle car' británico, envuelto en uno de los diseños más bellos de la automoción moderna.

Conclusión

El Jaguar F-Type SVR es una celebración del exceso, un coche comprado con el corazón y no con la cabeza. Es un monumento al motor de combustión en su forma más salvaje y carismática. No es el más práctico ni el más eficiente, pero cada viaje se convierte en un evento, una experiencia inolvidable que ataca todos los sentidos. Es un futuro clásico, una bestia hermosa y atronadora que representa lo mejor de una era que se desvanece, un auténtico tesoro para quien busca la emoción en estado puro.