Honda Accord 4p 2.0i TD · 105 CV (2000-2001)

1999
Gasóleo
FWD
Manual 5v
Honda Accord - Vista 1
Honda Accord - Vista 2
Honda Accord - Vista 3
Honda Accord - Vista 4

Especificaciones y análisis del Honda Accord

Potencia

105CV

Par

210Nm

Consumo

6.4l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

13.1s

Vel. Máx.

185km/h

Peso

1451kg

Precio

22,418

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

427 L

Depósito

65 L

Potencia

77 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima105 CV / 77 kW
Par máximo210 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito65 L
Maletero427 L

Análisis detallado del Honda Accord 4p 2.0i TD · 105 CV (2000-2001)

Descripción general

El Honda Accord de finales de los 90 y principios del 2000 es más que una berlina; es un símbolo de la ingeniería japonesa en su máxima expresión. Esta versión diésel, el 2.0i TD, llegó en un momento en que Europa abrazaba el gasóleo, y Honda respondió con un coche que prometía unir la eficiencia del diésel con la legendaria fiabilidad y el refinamiento dinámico de la marca. Recordarlo es evocar una época en la que los coches se construían para durar y para ser conducidos con una conexión pura y mecánica.

Experiencia de conducción

Al volante, el Accord 2.0i TD no busca arrancar el asfalto, sino devorar kilómetros con una serenidad imperturbable. Sus 105 caballos y el empuje del turbo a bajas vueltas lo convierten en un compañero de viaje leal y solvente. La verdadera magia reside en su chasis: la suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes, una solución de coche de categoría superior, le otorga un equilibrio sublime entre confort en carretera y una compostura en curvas que inspira una confianza total. Es una sensación de control y calidad de rodadura que te hace sentir que viajas en una máquina excepcionalmente bien hecha.

Diseño y estética

Su diseño es un ejercicio de elegancia atemporal. Sin estridencias ni modas pasajeras, el Accord presenta una silueta clásica, proporcionada y con una calidad de ajustes que habla por sí sola. Las líneas son limpias y fluidas, transmitiendo una sensación de solidez y seriedad. Por dentro, el ambiente es funcional y ergonómico, donde cada mando está en su sitio y los materiales, aunque sobrios, están pensados para resistir el paso del tiempo y el uso diario. Es un habitáculo que te acoge y te hace sentir en casa, sin distracciones.

Tecnología y características

En el año 2000, la tecnología de este Accord residía en su corazón mecánico. El motor diésel de inyección directa con turbo e intercooler era una apuesta moderna y eficiente. Sin embargo, la joya de la corona era su sofisticada suspensión de doble paralelogramo, una tecnología heredada de la competición que garantizaba un comportamiento dinámico superior. Aunque carece de las pantallas y asistencias actuales, su tecnología se centraba en lo esencial: ofrecer una experiencia de conducción segura, cómoda y refinada.

Competencia

En un mercado dominado por berlinas diésel europeas como el Volkswagen Passat TDI, el Peugeot 406 HDI o el Ford Mondeo TDDi, el Honda Accord se posicionaba como la alternativa para el conductor que buscaba algo más. Era la elección de quien valoraba por encima de todo la finura mecánica, una calidad de construcción a prueba de bombas y un comportamiento dinámico que pocos de sus rivales podían igualar. Competía no solo en cifras, sino en la promesa de una tranquilidad y una satisfacción a largo plazo que solo Honda sabía ofrecer.

Conclusión

El Honda Accord 2.0i TD es una de esas joyas ocultas del mercado. Un coche que representa la filosofía de Honda aplicada a un motor diésel: fiabilidad inquebrantable, un confort de marcha excepcional y una eficiencia notable. No es el más rápido ni el más llamativo, pero es un coche que enamora por su integridad, su calidad de ingeniería y su capacidad para servir fielmente año tras año. Es, en esencia, un amigo leal sobre ruedas, un testimonio rodante de cómo se hacían los grandes coches.