Especificaciones y análisis del Hispano-Suiza Carmen
Potencia
510CV
Par
-Nm
Consumo
-l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
3s
Vel. Máx.
250km/h
Peso
-kg
Precio
1,815,000€
Resumen técnico
Eléctrico
No disponible --v
RWD
2 / 2 puertas
- L
- L
375 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Hispano-Suiza Carmen · 510 CV (2019)
Descripción general
El Hispano-Suiza Carmen no es simplemente un coche; es la resurrección de una leyenda, un sueño eléctrico esculpido en fibra de carbono que evoca la grandeza de una de las marcas más ilustres de la historia del automóvil. Con un precio que roza los dos millones de euros, cada una de las limitadas unidades es una declaración de exclusividad y pasión, un puente entre el glorioso pasado art déco y un futuro electrizante.
Experiencia de conducción
Ponerse a los mandos del Carmen es una experiencia visceral. Sus 510 caballos eléctricos se desatan de forma instantánea y silenciosa, catapultándote de 0 a 100 km/h en apenas 3 segundos. Es una fuerza abrumadora pero controlada, una oleada de par que te pega al asiento sin el estruendo de un motor de combustión. La tracción trasera y un chasis afinado con suspensiones de paralelogramo deformable prometen una conexión pura con el asfalto, una danza entre la potencia bruta y la agilidad de un deportivo de pura cepa.
Diseño y estética
Su diseño es pura emoción, un homenaje directo al icónico Dubonnet Xenia de 1938. La carrocería, larga, ancha y extraordinariamente baja, fluye con una elegancia aerodinámica que culmina en sus característicos pasos de rueda traseros carenados. Es una escultura en movimiento, una fusión perfecta de nostalgia y vanguardia donde la fibra de carbono se entrelaza con detalles de lujo artesanal. Abrir sus puertas de tijera es acceder a un santuario de piel y metal pulido que te transporta a otra época.
Tecnología y características
Bajo su piel de alta costura se esconde un corazón tecnológico de última generación. Un monocasco de fibra de carbono garantiza una rigidez y ligereza excepcionales, la base perfecta para su sistema de propulsión eléctrico. La batería de 80 kWh y 750 voltios alimenta los motores que entregan una potencia formidable, mientras que los frenos carbocerámicos de 380 mm aseguran una capacidad de detención a la altura de sus prestaciones estratosféricas, demostrando que la tradición y la innovación pueden coexistir en perfecta armonía.
Competencia
Encontrar un rival directo para el Carmen es una tarea casi imposible. No compite en la misma liga que los hiperdeportivos eléctricos centrados únicamente en las cifras, como un Rimac Nevera. Su alma está más cerca de creaciones artesanales como las de Pagani o Koenigsegg, donde el arte, la exclusividad y la historia pesan tanto como las prestaciones. El Carmen ha creado su propio nicho, un espacio donde el lujo, el diseño retrofuturista y la propulsión eléctrica se dan la mano de una forma única.
Conclusión
El Hispano-Suiza Carmen es mucho más que la suma de sus partes. Es una obra de arte rodante, un capricho para coleccionistas que entienden el automóvil como una forma de expresión. Representa el coraje de revivir un nombre histórico no para imitar el pasado, sino para reinterpretarlo y proyectarlo hacia el futuro. Es una máquina emocional, exclusiva y radicalmente diferente, un tesoro que garantiza que el legado de Hispano-Suiza brillará con fuerza en el siglo XXI.