Especificaciones y análisis del Ford Grand C-MAX
Potencia
140CV
Par
320Nm
Consumo
5.8l/100
Emisiones
154g/km
0-100 km/h
10.5s
Vel. Máx.
198km/h
Peso
1634kg
Precio
26,600€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 6v
FWD
7 / 5 puertas
475 L
60 L
103 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford Grand C-MAX Titanium 2.0 TDCi 140 CV PowerShift 7 plazas (2012-2013)
Descripción general
El Ford Grand C-MAX de 2011 irrumpió en el segmento de los monovolúmenes como una bocanada de aire fresco, una propuesta que prometía no solo espacio y versatilidad para siete pasajeros, sino también el alma dinámica que caracteriza a Ford. Es un vehículo pensado desde el corazón para las familias que aman conducir, un refugio de comodidad y funcionalidad sin renunciar a la emoción del viaje.
Experiencia de conducción
Al volante, el Grand C-MAX se siente sorprendentemente ágil y plantado en la carretera, desafiando su tamaño. El motor 2.0 TDCi de 140 CV empuja con una fuerza contundente y serena desde bajas vueltas, mientras que la caja de cambios PowerShift de doble embrague hila las marchas con una suavidad y rapidez que te hacen olvidar que conduces un vehículo familiar. La suspensión logra un equilibrio magistral entre confort para los pasajeros y firmeza para enlazar curvas con una confianza inesperada, transmitiendo una sensación de control y seguridad que enamora.
Diseño y estética
Su diseño, fruto de la filosofía 'Kinetic Design' de Ford, fluye con líneas dinámicas que le otorgan una apariencia atlética y moderna, escapando de la estética cúbica de sus rivales. Las puertas traseras correderas no son solo un rasgo práctico que facilita la vida diaria con niños, sino también una declaración de intenciones sobre su enfoque familiar. Por dentro, el espacio es inteligente y modular, un santuario de luz y amplitud donde cada rincón está pensado para el confort y la convivencia.
Tecnología y características
En su acabado Titanium, este Grand C-MAX ofrecía un equipamiento tecnológico avanzado para su época. Más allá del climatizador o el control de crucero, destacaba la transmisión PowerShift, una pieza de ingeniería que aportaba una experiencia de conducción superior. El sistema de infoentretenimiento, aunque de una generación anterior, centralizaba las funciones esenciales, y la dirección con asistencia eléctrica contribuía a esa sensación de agilidad y facilidad de manejo que lo definía.
Competencia
En un mercado muy competido, el Ford Grand C-MAX se enfrentó a titanes como el Renault Grand Scénic, el Citroën Grand C4 Picasso o el Volkswagen Touran. Mientras sus rivales franceses apostaban por el confort absoluto y el alemán por la sobriedad y la calidad percibida, el Ford se distinguió por ofrecer la experiencia de conducción más gratificante y emocional del segmento, convirtiéndose en la elección de aquellos que buscaban algo más que un simple medio de transporte.
Conclusión
El Ford Grand C-MAX es mucho más que un monovolumen de siete plazas; es la prueba de que la paternidad no implica renunciar al placer de conducir. Su brillante chasis, un motor solvente y un diseño inteligente y atractivo lo convierten en una opción redonda y llena de alma. Es un coche que cuida de tu familia en el día a día y te regala una sonrisa en cada escapada, un compañero de viaje fiel que deja una huella imborrable.