Especificaciones y análisis del Ford Focus
Potencia
131CV
Par
174Nm
Consumo
8.9l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
9.6s
Vel. Máx.
201km/h
Peso
1195kg
Precio
15,115€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
520 L
55 L
96 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford Focus Ghia 2.0 Wagon · 131 CV (1998-2000)
Descripción general
El Ford Focus de 1998 no fue solo un coche, fue una declaración de intenciones. En su versión Wagon, redefinió lo que un coche familiar podía ser, combinando una practicidad excepcional con un espíritu que invitaba a disfrutar de cada kilómetro. Llegó para romper moldes y lo consiguió, dejando una huella imborrable en la historia del automóvil.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante de este Focus es redescubrir el placer de conducir. Su motor 2.0 de 131 caballos empuja con una energía honesta y lineal, perfectamente acoplado a una caja de cambios manual de 5 velocidades precisa y comunicativa. Pero la verdadera magia reside en su chasis; la agilidad y el aplomo en curva son extraordinarios, transmitiendo una confianza y una conexión con el asfalto que emocionan. Es un coche que te habla y te pide que disfrutes del viaje, no solo del destino.
Diseño y estética
El lenguaje 'New Edge Design' fue una audaz bofetada a la monotonía de finales de los 90. Con sus aristas afiladas, sus ópticas triangulares y un perfil dinámico, el Focus Wagon era una escultura en movimiento. No sacrificaba la función por la forma; su espacioso maletero de 520 litros y su interior inteligentemente diseñado lo convertían en el compañero perfecto para la vida familiar, pero con un estilo que giraba cabezas.
Tecnología y características
La mayor innovación tecnológica no estaba a la vista, sino bajo la carrocería: su aclamada suspensión trasera multibrazo 'Control Blade'. Este sistema, propio de segmentos superiores, le otorgaba un comportamiento dinámico sin igual en su clase. En el interior, el acabado Ghia ofrecía un equipamiento generoso para la época, con elementos de confort que hacían cada trayecto más placentero, demostrando que la tecnología también podía estar al servicio del bienestar.
Competencia
En un mercado dominado por propuestas más conservadoras como el Volkswagen Golf Variant o el Opel Astra Caravan, el Ford Focus Wagon irrumpió como un soplo de aire fresco. Mientras sus rivales apostaban por la sobriedad, el Focus ofrecía una experiencia de conducción superior y un diseño que no dejaba a nadie indiferente, posicionándose como la elección para aquellos que buscaban algo más que un simple medio de transporte.
Conclusión
El Ford Focus Ghia 2.0 Wagon es mucho más que un coche familiar de finales de siglo. Es el recuerdo de una época en la que la ingeniería y la pasión por la conducción se unieron para crear un vehículo accesible, práctico y, sobre todo, emocionante. Un futuro clásico que demostró que no es necesario renunciar a la diversión cuando la familia crece.




