Ford Focus Coupé Business 1.6 TDCi 90 CV (2008-2009)

2008
Gasóleo
FWD
Manual 5v
Ford Focus - Vista 1
Ford Focus - Vista 2
Ford Focus - Vista 3
Ford Focus - Vista 4

Especificaciones y análisis del Ford Focus

Potencia

90CV

Par

215Nm

Consumo

4.5l/100

Emisiones

118g/km

0-100 km/h

12.6s

Vel. Máx.

177km/h

Peso

1335kg

Precio

13,630

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 3 puertas

Maletero

396 L

Depósito

53 L

Potencia

66 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima90 CV / 66 kW
Par máximo215 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito53 L
Maletero396 L

Análisis detallado del Ford Focus Coupé Business 1.6 TDCi 90 CV (2008-2009)

Descripción general

El Ford Focus Coupé de 2008 es la encarnación de un equilibrio casi perfecto. En una época en la que Ford apostaba por su aclamado 'Kinetic Design', este modelo de tres puertas se presentaba como una opción que aunaba un estilo dinámico y juvenil con la eficiencia y pragmatismo de un motor diésel pensado para el día a día. No era solo un coche, era una declaración de intenciones: la conducción emocionante no tenía por qué estar reñida con un consumo contenido.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante de este Focus es redescubrir el placer de una conducción pura. Sus 90 caballos pueden parecer modestos, pero el motor 1.6 TDCi entrega su par de 215 Nm con una energía sorprendente desde bajas vueltas, ideal para una conducción ágil en ciudad y carretera. Sin embargo, la verdadera magia reside en su chasis. La suspensión trasera de paralelogramo deformable, una seña de identidad de Ford, te conecta con el asfalto de una manera íntima y segura. Cada curva se siente como una invitación a disfrutar, transmitiendo una confianza y una agilidad que pocos compactos de su tiempo podían igualar. Es un coche que te hace sentir el camino.

Diseño y estética

Visualmente, el Focus Coupé es pura energía contenida. Las líneas fluidas y tensas de su carrocería de tres puertas le otorgan una silueta atlética y compacta, más agresiva que la de su hermano de cinco puertas. El frontal, con su característica parrilla trapezoidal y faros afilados, parece cortar el viento incluso en parado. El interior, aunque funcional y sin grandes lujos, envolvía al conductor en un puesto de mando ergonómico, con una instrumentación clara y una sensación de solidez que ha envejecido con dignidad.

Tecnología y características

En 2008, la tecnología se medía en términos de eficiencia y seguridad más que en pantallas. Este Focus destacaba por su motor diésel common-rail con turbo e intercooler, una mecánica moderna que lograba consumos homologados de tan solo 4.5 litros a los cien. En cuanto a seguridad, contaba con lo esencial de la época, como frenos ABS y airbags. El equipamiento de confort era sencillo, centrado en lo necesario para hacer los viajes agradables, pero el verdadero avance tecnológico estaba bajo el capó y en la brillante ingeniería de su chasis.

Competencia

La batalla en el segmento de los compactos era feroz. Este Focus se enfrentaba a titanes como el Volkswagen Golf, siempre un referente por su calidad; el SEAT León, con su carácter latino y deportivo; el Opel Astra GTC, otro coupé de diseño impactante; y los franceses Citroën C4 Coupé y Renault Mégane Coupé, que apostaban por diseños audaces y confort. Frente a todos ellos, el Focus siempre esgrimió el argumento imbatible de una dinámica de conducción superior.

Conclusión

El Ford Focus Coupé 1.6 TDCi 90 CV es mucho más que un coche económico y fiable. Es un vehículo que apela directamente a la emoción de conducir. Representa una elección inteligente para quien valora un diseño con personalidad, unos costes de uso muy bajos y, sobre todo, un comportamiento en carretera que dibuja sonrisas. Es la prueba de que no se necesitan cifras de potencia estratosféricas para sentir una conexión genuina con la máquina y la carretera, un coche honesto y gratificante que dejó una huella imborrable.