Especificaciones y análisis del Ford Fiesta
Potencia
101CV
Par
143Nm
Consumo
7.5l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11.7s
Vel. Máx.
179km/h
Peso
1130kg
Precio
11,630€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 4v
FWD
5 / 3 puertas
261 L
45 L
74 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford Fiesta Coupé Steel 1.6 100 CV Durashift Aut. (2005)
Descripción general
El Ford Fiesta Coupé Steel de 2005 no es un coche cualquiera; es una declaración de intenciones de una época. En un mar de utilitarios, esta versión especial con su motor 1.6 de 101 caballos y cambio automático buscaba ofrecer un toque de distinción y comodidad, envolviendo el espíritu juvenil del Fiesta en una carrocería de tres puertas con aspiraciones de coupé.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante es retroceder a una conducción más pura y conectada. Los 101 caballos del motor Duratec se sienten vivos y voluntariosos, aunque la caja automática de cuatro velocidades suaviza la entrega, priorizando el confort sobre la deportividad pura. No esperes aceleraciones fulgurantes, pero sí una agilidad deliciosa en ciudad y carreteras secundarias. El chasis, un punto fuerte histórico del Fiesta, transmite confianza y te invita a jugar en cada curva, recordándote por qué Ford era un referente en dinamismo.
Diseño y estética
Su silueta de tres puertas, más afilada y compacta, evoca una deportividad sutil y atractiva. La edición 'Steel' le añadía un carácter especial con detalles únicos y unas llantas de 15 pulgadas que llenaban bien los pasos de rueda. Por dentro, el salpicadero con sus plásticos plateados y su diseño funcional es un fiel reflejo de los 2000. No hay lujos, pero sí una atmósfera honesta y un puesto de conducción que te hace sentir parte del coche desde el primer instante.
Tecnología y características
La tecnología aquí reside en su simplicidad mecánica. El corazón es un robusto motor de inyección indirecta y el cerebro es una caja de cambios automática de convertidor de par. No encontrarás pantallas táctiles ni asistentes complejos. Su mayor lujo tecnológico era, precisamente, no tener que pisar el embrague. Es un coche que se disfruta por su ingeniería directa: suspensión McPherson delante, un eje torsional detrás y una dirección que comunica lo que pisan las ruedas sin filtros.
Competencia
En su momento, se batió en duelo con gigantes como el Peugeot 206, el Renault Clio o el SEAT Ibiza. Mientras algunos de sus rivales podían ofrecer interiores más vistosos o motores diésel más eficientes, el Fiesta siempre guardaba un as bajo la manga: una puesta a punto del chasis que enamoraba a quienes de verdad disfrutaban conduciendo. Era la elección pasional frente a otras opciones quizás más racionales.
Conclusión
El Ford Fiesta Coupé Steel es más que un simple utilitario; es una pequeña joya para nostálgicos y amantes de la conducción analógica. Ofrece una combinación única de diseño juvenil, agilidad sorprendente y la comodidad de un cambio automático. No es el más rápido ni el más moderno, pero su carácter honesto y la diversión que proporciona su chasis lo convierten en un futuro clásico popular, un coche con alma que te saca una sonrisa en el trayecto diario.