Especificaciones y análisis del Ford Fiesta
Potencia
60CV
Par
105Nm
Consumo
6.9l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
16s
Vel. Máx.
155km/h
Peso
1034kg
Precio
9,412€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
250 L
40 L
44 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford Fiesta Ambiente 1.3 EFI 5p · 60 CV (1999-2000)
Descripción general
El Ford Fiesta de 1999 es más que un simple coche; es el eco de una época, el compañero de innumerables primeras aventuras. Representa la esencia de la movilidad accesible y fiable, un vehículo que motorizó a una generación con su sencillez y espíritu incansable, dejando una huella imborrable en el corazón de quienes lo condujeron.
Experiencia de conducción
Conducir este Fiesta es una experiencia analógica y pura. Sus 60 caballos no buscan romper récords, sino entregar una respuesta honesta y directa en la ciudad. Sientes la carretera a través de su dirección sin filtros y el cambio manual de cinco velocidades te conecta directamente con la mecánica. Es un coche que no te aísla, sino que te invita a participar en cada trayecto, recordándote el placer de una conducción sencilla y auténtica.
Diseño y estética
Su diseño, hijo del 'New Edge' de Ford, combina curvas suaves con aristas definidas, dándole una apariencia amigable y dinámica que ha envejecido con dignidad. Sus compactas dimensiones y su práctica carrocería de cinco puertas lo convierten en un icono urbano. No es un coche que grite para llamar la atención, sino que enamora con su encanto discreto y su silueta familiar, un clásico popular que sigue girando cabezas por pura nostalgia.
Tecnología y características
La tecnología del Fiesta de 1999 reside en su simplicidad mecánica. Aquí no encontrarás pantallas táctiles ni asistencias complejas. Su corazón es un robusto motor de inyección indirecta y su alma, una caja de cambios manual. Es un coche construido para durar, donde la fiabilidad de sus componentes prevalece sobre cualquier artificio electrónico, ofreciendo una tranquilidad que solo los coches de antes podían dar.
Competencia
En un mercado competido por gigantes como el Opel Corsa, el Renault Clio o el SEAT Ibiza, el Ford Fiesta siempre destacó por su excelente puesta a punto del chasis. Ofrecía un equilibrio casi perfecto entre confort y agilidad, una sensación de conexión con el asfalto que lo convertía en uno de los más divertidos de conducir de su segmento, defendiendo con orgullo el honor de la marca del óvalo azul.
Conclusión
Este Ford Fiesta no es un objeto, es un baúl de recuerdos. Simboliza la libertad de la juventud, la fiabilidad del día a día y la alegría de lo simple. Es un coche que enseña a conducir, que acompaña en silencio y que nunca falla. Más allá de sus modestas cifras, su verdadero valor reside en su honestidad y en la conexión emocional que crea con quien tiene el placer de estar a su volante.




