Especificaciones y análisis del Ford C-MAX
Potencia
150CV
Par
240Nm
Consumo
6.4l/100
Emisiones
149g/km
0-100 km/h
9.4s
Vel. Máx.
204km/h
Peso
1385kg
Precio
21,250€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
471 L
55 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford C-MAX Titanium 1.6 EcoBoost Auto-Start-Stop 150 CV (2012-2013)
Descripción general
El Ford C-MAX de 2012 con el motor 1.6 EcoBoost de 150 CV no es un monovolumen cualquiera. Es la respuesta de Ford para aquellos padres de familia que se niegan a renunciar al placer de conducir. Representa un equilibrio casi perfecto entre la versatilidad que exige la vida diaria y la chispa de emoción que anhelamos en la carretera, un coche que promete espacio sin sacrificar el alma.
Experiencia de conducción
Al volante, el C-MAX sorprende y enamora. Su motor EcoBoost empuja con una energía inesperada desde bajas revoluciones, gracias a un turbo que entrega el par de forma lineal y contundente. La sensación no es la de un vehículo familiar, sino la de un compacto ágil y dispuesto. Su chasis, una obra maestra de Ford, se aferra al asfalto con una precisión que inspira confianza en cada curva, transmitiendo una conexión directa con la carretera que pocos rivales pueden igualar. Es un coche que te invita a buscar la ruta más larga y sinuosa de vuelta a casa.
Diseño y estética
Visualmente, el C-MAX escapa de las formas cuadradas típicas del segmento. Sus líneas fluidas y su frontal afilado, herencia del lenguaje de diseño 'Kinetic Design' de Ford, le otorgan un dinamismo que refleja su carácter. Por dentro, el acabado Titanium eleva la experiencia con materiales de calidad y un puesto de conducción envolvente. Aunque la consola central puede parecer abrumadora por su cantidad de botones, todo está pensado para el conductor, creando una atmósfera de control y confort en un habitáculo espacioso y luminoso.
Tecnología y características
Para su época, este C-MAX estaba a la vanguardia. El sistema Auto-Start-Stop era una declaración de intenciones en busca de la eficiencia, mientras que la dirección asistida eléctrica y un chasis afinado con control de estabilidad garantizaban una seguridad activa de primer nivel. El equipamiento Titanium solía incluir comodidades como el climatizador bizona o el control de crucero, elementos que hacían de cada viaje una experiencia más relajada y placentera, demostrando que la tecnología podía estar al servicio tanto de la seguridad como del confort.
Competencia
En un mercado competido, se enfrentó a gigantes como el Renault Scénic, el Citroën C4 Picasso o el Volkswagen Touran. Mientras sus competidores franceses apostaban por la modularidad y el confort absoluto, y el alemán por la sobriedad y la calidad percibida, el Ford C-MAX jugaba una carta diferente: la de la emoción al volante. Se posicionó como la opción para el conductor que, necesitando espacio, no quería sentirse al mando de una simple herramienta de transporte.
Conclusión
El Ford C-MAX 1.6 EcoBoost es mucho más que un coche familiar; es una declaración de principios. Es la prueba de que la funcionalidad no tiene por qué estar reñida con la diversión. Ofrece un espacio generoso, un consumo razonable y, sobre todo, un comportamiento dinámico excepcional que lo convierte en una de las opciones más gratificantes y completas de su categoría. Es un coche con corazón, diseñado para quienes aman conducir, sin importar cuántos pasajeros lleven a bordo.




