Especificaciones y análisis del Ford C-MAX
Potencia
90CV
Par
215Nm
Consumo
4.8l/100
Emisiones
127g/km
0-100 km/h
13.1s
Vel. Máx.
174km/h
Peso
1419kg
Precio
16,590€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
550 L
55 L
66 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Ford Focus C-Max Newport 1.6 TDCi 90cv (2006-2007)
Descripción general
El Ford C-MAX de 2004 irrumpió en el panorama automovilístico como una bocanada de aire fresco para las familias. No era solo un monovolumen; era la promesa de un viaje familiar donde el placer de conducir no se sacrificaba por la practicidad. Basado en la aclamada plataforma del Focus, este C-MAX se sentía como un hogar sobre ruedas, un compañero fiel para crear recuerdos inolvidables en cada kilómetro.
Experiencia de conducción
Al volante, el motor 1.6 TDCi de 90 CV se revela como un corazón honesto y trabajador. No busca récords de velocidad, sino ofrecer una respuesta suave y constante desde bajas revoluciones, ideal para el día a día y para viajar sin estrés. La sensación es de control y seguridad, con un chasis que se aferra al asfalto con una nobleza sorprendente para un vehículo de su altura. Es un coche que te susurra confianza, que te invita a disfrutar del paisaje y de la compañía, sabiendo que su eficiencia y aplomo te llevarán a tu destino con una tranquilidad pasmosa.
Diseño y estética
Su diseño es una oda a la inteligencia funcional. Por fuera, sus líneas fluidas y amables huyen de estridencias para maximizar el espacio interior. Dentro, te acoge un habitáculo pensado por y para la vida familiar. La amplitud es generosa, la visibilidad es magnífica y el maletero de 550 litros parece no tener fondo. Cada rincón está diseñado con un propósito, creando una atmósfera de confort y versatilidad que convierte cualquier trayecto en una experiencia agradable y sencilla.
Tecnología y características
En su corazón tecnológico latía la eficiencia. El motor diésel de inyección directa por conducto común era una pieza de ingeniería avanzada para su época, logrando consumos muy bajos sin renunciar a una respuesta solvente. Aunque carece de las pantallas y asistentes actuales, ofrecía todo lo esencial para un viaje seguro y confortable: una dirección precisa, un sistema de frenado eficaz y un climatizador que garantizaba el bienestar de todos los pasajeros. Era la tecnología justa, la que sirve a las personas sin abrumar.
Competencia
En un mercado competido por gigantes como el Renault Scénic, el Citroën C4 Picasso o el Volkswagen Touran, el Ford C-MAX jugó su carta más personal: la dinámica de conducción. Mientras muchos rivales se centraban exclusivamente en la modularidad, el C-MAX ofrecía un tacto de conducción más ágil y directo, heredado de su hermano el Focus. Era la elección para el padre o madre de familia que, además de espacio, buscaba sentir una conexión especial con la carretera.
Conclusión
El Ford C-MAX 1.6 TDCi de 90 CV es mucho más que un simple vehículo familiar; es un equilibrio magistral entre razón y emoción. Representa la compra inteligente de quien busca fiabilidad, un coste de uso contenido y una enorme practicidad, pero sin renunciar a ese chispazo de placer al conducir que define a Ford. Es un coche que cumplió y sigue cumpliendo su promesa: ser un refugio seguro, cómodo y eficiente para la aventura más importante, la de la vida en familia.