Fiat Multipla 1.6 16v SX · 103 CV (1998-2000)

1999
Gasolina
FWD
Manual 5v
Fiat Multipla - Vista 1
Fiat Multipla - Vista 2
Fiat Multipla - Vista 3
Fiat Multipla - Vista 4

Especificaciones y análisis del Fiat Multipla

Potencia

103CV

Par

144Nm

Consumo

8.6l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

12.6s

Vel. Máx.

170km/h

Peso

1300kg

Precio

14,695

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

6 / 5 puertas

Maletero

430 L

Depósito

65 L

Potencia

76 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima103 CV / 76 kW
Par máximo144 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito65 L
Maletero430 L

Análisis detallado del Fiat Multipla 1.6 16v SX · 103 CV (1998-2000)

Descripción general

El Fiat Multipla de 1999 no es solo un coche, es una declaración de intenciones, una obra de ingeniería que desafió todas las convenciones estéticas para entregar una funcionalidad sin precedentes. Es un vehículo que genera emociones intensas, sin término medio: o lo amas por su ingenio o lo rechazas por su apariencia, pero jamás te dejará indiferente. Nació con la audaz promesa de alojar a seis personas y su equipaje en menos de cuatro metros de longitud, una proeza que marcó un antes y un después en el concepto de monovolumen compacto.

Experiencia de conducción

Conducir un Multipla es una experiencia casi panorámica. La inmensa superficie acristalada y la posición de conducción elevada te sumergen en el entorno, creando una sensación de espacio y visibilidad que pocos coches pueden igualar. Su motor de 103 caballos no busca la adrenalina, sino ofrecer una respuesta honesta y suficiente para mover a la familia con soltura. El tacto del cambio manual y la sencillez de su mecánica transmiten una conexión directa y sin filtros, recordándonos una época en la que la conducción era una tarea más pura y centrada en el viaje.

Diseño y estética

El diseño es su alma y su controversia. Esa estructura de dos niveles, con el famoso 'escalón' que aloja las luces y que le valió el apodo de 'delfín', es la clave de su genialidad. Esta forma, tan criticada como estudiada, es la máxima expresión del principio 'la forma sigue a la función'. Su increíble anchura, desproporcionada para su corta longitud, es el secreto para un habitáculo diáfano y sociable. Es un diseño valiente, una escultura rodante que priorizó el bienestar de sus ocupantes por encima de cualquier canon de belleza, convirtiéndose en un icono inolvidable.

Tecnología y características

La verdadera innovación tecnológica del Multipla reside en su arquitectura interior. La configuración de 3+3 asientos, todos ellos individuales y modulables, era una solución revolucionaria. El cuadro de instrumentos, agrupado en una consola central de aspecto futurista, fue diseñado para ser visible por todos los ocupantes delanteros, fomentando una experiencia compartida. Más allá de esta genialidad conceptual, su tecnología mecánica era sencilla y probada: un motor de inyección indirecta, frenos de disco delanteros y una electrónica básica, todo al servicio de la fiabilidad y el coste contenido.

Competencia

Encontrar un rival directo para el Multipla es casi imposible por su singular configuración de seis plazas. Sin embargo, competía en el segmento de los monovolúmenes compactos contra modelos como el Renault Scénic o el Citroën Xsara Picasso. Mientras sus competidores ofrecían soluciones más convencionales de cinco o siete plazas, el Multipla jugaba en su propia liga, ofreciendo una anchura interior y una sociabilidad a bordo que ningún otro podía replicar. Su verdadera ventaja era esa sensación de 'salón rodante' que lo hacía único.

Conclusión

El Fiat Multipla es mucho más que un coche peculiar; es un monumento a la audacia y a la inteligencia en el diseño. Sacrificó la belleza convencional para alcanzar la cima de la funcionalidad, creando un vehículo familiar que sigue siendo asombrosamente práctico y espacioso. Es un coche que provoca sonrisas y conversaciones, un recordatorio de que la innovación a veces requiere romper todas las reglas. Su legado no es el de un éxito de ventas, sino el de un clásico de culto que demostró que había otra forma de pensar el automóvil.