Especificaciones y análisis del Citroën Xsara
Potencia
69CV
Par
125Nm
Consumo
6.2l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
14.7s
Vel. Máx.
162km/h
Peso
1112kg
Precio
14,385€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
408 L
54 L
51 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën Xsara 5p 1.9D X · 69 CV (1997-2000)
Descripción general
El Citroën Xsara 1.9D de 1998 no es solo un coche, es el recuerdo de una época donde la fiabilidad y la sencillez eran las máximas aspiraciones. Nacido para suceder al exitoso ZX, este compacto se ganó el corazón de miles de familias por su espíritu práctico y un confort de marcha que era pura esencia Citroën, un compañero de viaje infatigable para el día a día.
Experiencia de conducción
Conducir este Xsara es una experiencia nostálgica. Sus 69 caballos diésel no buscan la adrenalina, sino la constancia y el ahorro. El sonido característico de su motor 1.9D es la banda sonora de un viaje tranquilo y predecible. La suspensión, fiel a la marca, absorbe las irregularidades con una suavidad que te aísla del estrés del asfalto, mientras que su cambio manual de cinco velocidades te conecta de forma directa y honesta con la mecánica. No es rápido, pero te lleva a tu destino con una calma reconfortante.
Diseño y estética
Su diseño es un reflejo de finales de los 90, con formas redondeadas y amables que abandonaban las aristas de la década anterior. No pretendía ser un icono de estilo, sino un vehículo funcional y acogedor. Su carrocería de cinco puertas ofrecía un acceso cómodo a un interior sorprendentemente espacioso y un maletero de 408 litros, generoso para su segmento. Es una silueta familiar, sin estridencias, que ha envejecido con la dignidad de lo bien hecho.
Tecnología y características
La tecnología del Xsara 1.9D es la de la robustez mecánica. Aquí no hay pantallas táctiles ni complejos asistentes electrónicos. Su corazón es un motor diésel de inyección indirecta, un bloque de hierro pensado para durar. Contaba con lo esencial para la época: frenos de disco delanteros y una suspensión eficaz que garantizaba la seguridad y el confort. Es la antítesis del coche moderno, un tributo a una ingeniería simple y duradera.
Competencia
En su tiempo, el Xsara se enfrentó a gigantes como el Renault Mégane, el Ford Focus, el Opel Astra y el eterno Volkswagen Golf. Frente a ellos, el Citroën jugó sus mejores cartas: un confort de suspensión superior y una habitabilidad que a menudo superaba a la de sus competidores. Era la elección racional para quien valoraba el espacio y la comodidad por encima de la deportividad.
Conclusión
El Citroën Xsara 1.9D es mucho más que un simple medio de transporte; es un símbolo de lealtad y resistencia. Un coche que cumplió su promesa de llevar a la gente a su destino de forma económica y segura, sin pedir casi nada a cambio. Hoy lo recordamos con cariño como un verdadero caballo de batalla, un miembro más de la familia que dejó una huella imborrable por su honestidad y su increíble durabilidad.