Especificaciones y análisis del Citroën XM
Potencia
110CV
Par
255Nm
Consumo
7.1l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11.9s
Vel. Máx.
192km/h
Peso
1463kg
Precio
31,276€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
540 L
80 L
81 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën XM 2.1 TD SX · 110 CV (2000)
Descripción general
El Citroën XM no es solo un coche; es una declaración de principios, el último gran buque insignia de una era en la que Citroën se atrevía a desafiar lo convencional. Lanzado para suceder al icónico CX, el XM llegó para redefinir el lujo y el confort en la carretera, envolviendo a sus ocupantes en una burbuja de innovación y diseño vanguardista que aún hoy sigue fascinando.
Experiencia de conducción
Conducir un XM es una experiencia casi etérea. La legendaria suspensión hidroneumática te hace sentir que flotas sobre el asfalto, absorbiendo cada imperfección con una suavidad que ningún coche moderno puede replicar. Es una alfombra mágica que te aísla del mundo exterior. El motor 2.1 TD, con su generoso par motor a bajas vueltas, no busca la velocidad explosiva, sino ofrecer un empuje constante y sereno, ideal para devorar kilómetros en autopista con una calma y un aplomo soberanos.
Diseño y estética
Su afilada carrocería en forma de cuña, obra del maestro Bertone, era pura ciencia ficción a finales de los 80. Con su enorme superficie acristalada y una línea aerodinámica espectacular, el XM rompía moldes y giraba cabezas. Por dentro, el ambiente era igualmente futurista y espacioso, con un salpicadero que parecía sacado de una nave espacial, el característico volante monobrazo y una sensación de amplitud y luminosidad inigualable. Un diseño que no envejece, simplemente se convierte en leyenda.
Tecnología y características
El corazón tecnológico del XM era su revolucionaria suspensión Hydractive. Este sistema inteligente, una evolución de la hidroneumática clásica, adaptaba la firmeza de la amortiguación en tiempo real, combinando un confort sublime con una estabilidad sorprendente. Fue uno de los primeros coches en ofrecer una suspensión activa controlada electrónicamente, un hito que demostraba la audacia de Citroën. Su motor diésel de 12 válvulas también era una pieza de ingeniería avanzada para la época.
Competencia
En su lucha por el trono de las grandes berlinas, el Citroën XM se enfrentó a la todopoderosa armada alemana, compuesta por el Mercedes-Benz Clase E W124, el BMW Serie 5 E34 y el Audi 100. Ofrecía una alternativa radicalmente diferente, basada en el confort y el diseño, frente a la sobriedad y deportividad germana. En su propio país, competía con el Peugeot 605, con el que compartía plataforma, y el Renault Safrane.
Conclusión
El Citroën XM es mucho más que una berlina de lujo; es el testamento de una filosofía automovilística que priorizaba el bienestar y la innovación por encima de todo. Hoy es un clásico de culto, un coche para entendidos que buscan una experiencia de conducción única e irrepetible. Poseer un XM es preservar un pedazo de la historia del automóvil, un recordatorio de que la audacia y la comodidad pueden crear algo verdaderamente mágico.
