Especificaciones y análisis del Citroën C6
Potencia
211CV
Par
290Nm
Consumo
11.2l/100
Emisiones
266g/km
0-100 km/h
9.4s
Vel. Máx.
230km/h
Peso
1891kg
Precio
52,090€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 6v
FWD
5 / 4 puertas
421 L
72 L
155 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C6 3.0i V6 Business CAS · 211 CV (2008-2009)
Descripción general
El Citroën C6 es mucho más que una berlina de lujo; es el último gran estandarte de la audacia y la innovación de Citroën. Lanzado en 2006, este vehículo se erigió como el heredero de mitos como el DS y el CX, ofreciendo una visión única del confort y la elegancia francesa, impulsado por un suave y potente motor V6 de 211 caballos que susurraba poder en lugar de gritarlo.
Experiencia de conducción
Conducir un C6 es una experiencia casi etérea. La suspensión hidroneumática Hydractive 3+ te aísla del mundo exterior, convirtiendo el asfalto en una alfombra de seda. Flota sobre las irregularidades con una suavidad que ningún otro coche de su época podía igualar. El silencio a bordo es absoluto, y la entrega de potencia del V6 es tan progresiva y refinada que los viajes se convierten en un ejercicio de pura relajación y placer. No es un coche para correr, es un coche para viajar en primera clase.
Diseño y estética
Su diseño es una declaración de intenciones, una escultura rodante que rompe con cualquier convencionalismo. La silueta alargada, la luneta trasera cóncava que rinde homenaje al CX y las puertas sin marco crean una presencia inconfundible y atemporal. Es un coche que genera emociones, amado por unos y no comprendido por otros, pero jamás deja indiferente. Representa el lujo francés en su forma más pura y vanguardista.
Tecnología y características
Para su época, el C6 era una proeza tecnológica. Fue uno de los primeros en incorporar un Head-Up Display que proyectaba información en el parabrisas, un sistema de alerta de cambio involuntario de carril y faros de xenón direccionales. Pero su verdadera joya era la suspensión activa, capaz de leer la carretera y adaptarse en milisegundos para ofrecer un confort soberano o una estabilidad imperturbable. Era tecnología al servicio del bienestar.
Competencia
En un mercado dominado por la rigidez y la deportividad de las berlinas alemanas como el Mercedes-Benz Clase E, el BMW Serie 5 o el Audi A6, el Citroën C6 propuso una alternativa radical. No buscaba competir en tiempos por vuelta, sino en calidad de vida a bordo. Su rival era la monotonía, ofreciendo una filosofía centrada en el confort absoluto, el diseño distintivo y una experiencia de conducción completamente diferente y personal.
Conclusión
El Citroën C6 es una obra maestra incomprendida, un futuro clásico desde el día de su lanzamiento. Es un coche para entendidos, para aquellos que valoran la originalidad, el confort supremo y el placer de viajar sin prisas. Representa el fin de una era, la del último gran Citroën, y su legado es el de haber demostrado que el lujo no siempre significa deportividad, sino una experiencia sensorial única e inolvidable.




