Especificaciones y análisis del Citroën C6
Potencia
204CV
Par
440Nm
Consumo
8.7l/100
Emisiones
230g/km
0-100 km/h
8.9s
Vel. Máx.
230km/h
Peso
1946kg
Precio
52,760€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 6v
FWD
5 / 4 puertas
421 L
72 L
150 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C6 2.7 HDi V6 CAS 6v Palas · 204 CV (2008)
Descripción general
El Citroën C6 de 2006 no es solo un coche, es la última gran berlina de representación de una marca con una historia legendaria en este segmento. Heredero de mitos como el DS y el CX, el C6 se presentó como una declaración de intenciones, un vehículo que desafiaba las convenciones del lujo alemán con una propuesta radicalmente francesa, centrada en el confort absoluto y un diseño que rompe moldes.
Experiencia de conducción
Conducir un C6 es una experiencia casi etérea. La suspensión hidroneumática Hydractive 3+ te aísla del mundo exterior, convirtiendo el asfalto en una alfombra de seda. El silencio a bordo es sepulcral, y el motor V6 diésel de 204 CV empuja con una suavidad y contundencia exquisitas, sin vibraciones. No busca la deportividad, sino transportarte en una burbuja de tranquilidad y bienestar, haciendo que cada viaje, por largo que sea, se sienta como un breve y placentero paseo.
Diseño y estética
Su estética es una obra de arte vanguardista y polarizante. La larguísima batalla, la línea de techo fluida que culmina en una icónica luneta trasera cóncava y las puertas sin marco crean una silueta única e inolvidable. Es un coche que no envejece, sino que se consolida como un clásico del diseño automotriz, un vehículo para quienes aprecian la belleza en lo diferente y no temen atraer todas las miradas.
Tecnología y características
Para su época, el C6 era un escaparate tecnológico. Fue uno de los pioneros en incorporar el Head-Up Display, que proyectaba información en el parabrisas, y el sistema de alerta de cambio involuntario de carril. Pero su mayor proeza tecnológica reside en su chasis, con una suspensión activa de flexibilidad y dureza variable que leía la carretera para ofrecer un confort y una estabilidad soberbios, un sello inconfundible de la ingeniería de Citroën.
Competencia
En un mercado dominado por la sobriedad y la deportividad de los Audi A6, BMW Serie 5 y Mercedes-Benz Clase E, el Citroën C6 se erigió como la alternativa inconformista. Mientras sus rivales alemanes competían en prestaciones y eficacia en curva, el C6 jugaba en otra liga: la del confort supremo, la originalidad estética y una concepción del lujo más enfocada en el bienestar de los pasajeros que en la velocidad pura.
Conclusión
El Citroën C6 fue un coche incomprendido en su tiempo, una apuesta valiente que el mercado no supo recompensar. Hoy, es un futuro clásico indiscutible, un automóvil de culto que representa la última expresión de una filosofía única. Es una joya para entendidos, una máquina que ofrece una experiencia de viaje inigualable y que encarna el verdadero espíritu innovador y audaz de Citroën.




