Especificaciones y análisis del Citroën C5
Potencia
140CV
Par
320Nm
Consumo
5.9l/100
Emisiones
155g/km
0-100 km/h
10.9s
Vel. Máx.
200km/h
Peso
1730kg
Precio
25,340€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
505 L
71 L
103 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C5 Tourer S HDi 140 FAP · 140 CV (2009)
Descripción general
El Citroën C5 Tourer de 2009 es mucho más que un simple coche familiar; es la encarnación del 'savoir-faire' francés aplicado a los largos viajes. Con su motor HDi de 140 caballos, esta berlina familiar no busca el aplauso en el circuito, sino conquistar el corazón de quienes valoran el confort supremo y un estilo que se desmarca de la sobriedad alemana, ofreciendo una experiencia de conducción única y profundamente relajante.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del C5 Tourer es como entrar en una burbuja de serenidad. La sensación predominante es la de flotar sobre el asfalto, gracias a una suspensión que parece borrar las imperfecciones de la carretera, un sello inconfundible de la marca. El motor diésel de 2.0 litros empuja con una fuerza tranquila y constante desde bajas vueltas, ideal para viajar a ritmo de crucero sin esfuerzo. No es un coche de reacciones fulgurantes, sino un compañero de viaje que te invita a devorar kilómetros con una calma y un aplomo que enamoran.
Diseño y estética
Su diseño es una declaración de elegancia y fluidez. Las líneas alargadas y la zaga perfectamente integrada crean una silueta de familiar que destila clase y dinamismo sin estridencias. Es un coche imponente, con una presencia que no pasa desapercibida. Por dentro, el ambiente es acogedor y sofisticado, con materiales de buena calidad para su época y un salpicadero que, aunque complejo, envuelve a los ocupantes. Detalles como el volante de buje fijo demuestran una audacia y una personalidad que lo hacen especial.
Tecnología y características
La verdadera joya tecnológica de este C5 reside en su chasis. La suspensión de paralelogramo deformable, a menudo la famosa Hidractiva de la marca, era un prodigio de ingeniería capaz de ofrecer un confort de marcha de limusina y una estabilidad imperturbable. El motor HDi con filtro de partículas ya era una mecánica moderna y eficiente para su tiempo, mientras que a bordo se disfrutaba de un equipamiento completo que buscaba hacer la vida más fácil, demostrando que la innovación en Citroën siempre ha estado al servicio del bienestar.
Competencia
En un mercado dominado por el pragmatismo de modelos como el Volkswagen Passat Variant o el Ford Mondeo Sportbreak, el Citroën C5 Tourer se erigía como la alternativa con alma. Competía también con el Peugeot 407 SW o el Renault Laguna Grand Tour, pero su propuesta de confort absoluto lo colocaba en una liga propia. Era la elección para quien no buscaba la conducción más afilada, sino la experiencia de viaje más sublime y distinguida.
Conclusión
El Citroën C5 Tourer HDi 140 es un coche para recordar, una oda al confort y al placer de viajar sin prisas. Representa una filosofía automovilística que hoy parece perdida, donde la comodidad y el carácter primaban sobre la deportividad artificial. Es un magnífico familiar que, bien cuidado, sigue siendo un refugio de paz sobre ruedas, un clásico moderno que demuestra que se puede ser elegante, práctico y profundamente original al mismo tiempo.




