Especificaciones y análisis del Citroën C5
Potencia
156CV
Par
240Nm
Consumo
7.7l/100
Emisiones
179g/km
0-100 km/h
10.2s
Vel. Máx.
210km/h
Peso
1609kg
Precio
30,515€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 6v
FWD
5 / 5 puertas
505 L
71 L
115 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C5 Tourer Exclusive THP 155 CAS · 156 CV (2010)
Descripción general
El Citroën C5 Tourer de 2010 es la encarnación del confort y la elegancia a la francesa en formato familiar. No es un coche que grite sus prestaciones, sino que susurra su vocación de gran viajero, un vehículo pensado para devorar kilómetros con una suavidad y un aplomo que enamoran a quienes valoran el bienestar por encima de todo.
Experiencia de conducción
Conducir este C5 es como flotar sobre una alfombra mágica. La legendaria suspensión hidroneumática Hydractive III+ te aísla del mundo exterior, filtrando las imperfecciones del asfalto con una maestría que pocos coches pueden igualar. El motor THP de 156 CV, unido al cambio automático, entrega la potencia de forma lineal y serena, sin brusquedad. Es una invitación a la calma, a disfrutar del viaje, convirtiendo cada desplazamiento en una experiencia sumamente relajante y placentera.
Diseño y estética
Su diseño es pura seducción. Huye de las líneas rectas y agresivas para abrazar una silueta fluida y escultural, rematada por la icónica luneta trasera cóncava, un sello inconfundible de Citroën. Por dentro, el acabado Exclusive te recibe en una atmósfera de calidad, con materiales cuidados y un puesto de conducción único protagonizado por el volante de buje fijo. Es un coche con una personalidad arrolladora que no deja a nadie indiferente.
Tecnología y características
La joya de la corona tecnológica es, sin duda, su suspensión activa, capaz de variar la altura y la firmeza para adaptarse a la carretera y al estilo de conducción. Más allá de eso, para su época, venía muy bien equipado con faros bi-xenón direccionales, un completo sistema de navegación y ayudas a la conducción que reforzaban la sensación de seguridad y control, todo ello enfocado en hacer la vida a bordo más fácil y confortable.
Competencia
En un mercado dominado por la sobriedad alemana de los Volkswagen Passat Variant y la eficacia dinámica de los Ford Mondeo Sportbreak, el C5 Tourer se erigía como la alternativa para el conductor que buscaba algo diferente. Era el refugio del confort y el diseño frente a rivales más convencionales o deportivos, ofreciendo una experiencia de viaje única en su segmento.
Conclusión
El Citroën C5 Tourer es mucho más que un coche familiar; es una declaración de principios. Es la elección de quien entiende que el verdadero lujo no es la velocidad, sino la tranquilidad. Un santuario rodante que combina un estilo innegable con un confort soberbio, ideal para quienes ven en cada viaje una oportunidad para disfrutar. Una compra que se hace tanto con el corazón como con la razón.




