Citroën C4 5p VTN@V HDi 110 FAP Airdream · 109 CV (2009-2010)

2008
Gasóleo
FWD
Manual 5v
Citroën C4 - Vista 1
Citroën C4 - Vista 2
Citroën C4 - Vista 3
Citroën C4 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Citroën C4

Potencia

109CV

Par

240Nm

Consumo

4.5l/100

Emisiones

119g/km

0-100 km/h

11.2s

Vel. Máx.

192km/h

Peso

1345kg

Precio

16,950

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

320 L

Depósito

60 L

Potencia

80 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima109 CV / 80 kW
Par máximo240 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito60 L
Maletero320 L

Análisis detallado del Citroën C4 5p VTN@V HDi 110 FAP Airdream · 109 CV (2009-2010)

Descripción general

El Citroën C4 de 2008 no era un coche más en el concurrido segmento de los compactos; era una declaración de intenciones. Con un espíritu audaz y un enfoque en el confort que honraba la herencia de la marca, este C4 se presentaba como una alternativa para quienes buscaban escapar de lo convencional y viajar en una burbuja de originalidad y bienestar.

Experiencia de conducción

Al volante, el motor HDi de 109 caballos se siente como un compañero de viaje leal y frugal. No busca récords de velocidad, sino ofrecer una respuesta suave y constante, ideal para devorar kilómetros sin fatiga. La suspensión, fiel a Citroën, filtra las imperfecciones del asfalto con una maestría que te aísla del mundo exterior, creando una atmósfera de serenidad. Es un coche que invita a una conducción tranquila, donde el placer no reside en la adrenalina, sino en la fluidez y el confort de cada desplazamiento.

Diseño y estética

Visualmente, el C4 era una obra de arte rodante, una ruptura con las líneas rectas y predecibles de su tiempo. Su silueta redondeada y su mirada futurista eran solo el preludio de un interior que te transportaba a otra dimensión. El volante de buje fijo, una genialidad ergonómica, y la instrumentación digital central creaban un puesto de conducción único, un espacio que te hacía sentir especial y diferente. Era un diseño valiente, de esos que o amas o no comprendes, pero que jamás pasa desapercibido.

Tecnología y características

Más allá de su estética, el C4 integraba tecnología pensada para el bienestar. La pantalla translúcida central ofrecía una lectura clara y sin distracciones, mientras que el volante multifunción concentraba todos los controles al alcance de los dedos, una solución tan innovadora como práctica. Esta versión Airdream, además, era un reflejo del compromiso con la eficiencia, logrando unas emisiones de CO2 muy bajas para su época, demostrando que la tecnología también podía estar al servicio del planeta.

Competencia

En un mercado dominado por gigantes como el Volkswagen Golf, el Ford Focus o el SEAT León, el Citroën C4 jugaba en su propia liga. Mientras sus rivales apostaban por la sobriedad alemana o la deportividad, el C4 ofrecía un santuario de confort y un diseño que era pura vanguardia. Competía con el Renault Mégane en originalidad y con el Peugeot 308 en eficiencia, pero ninguno lograba transmitir esa sensación única de estar conduciendo un pedazo del futuro.

Conclusión

El Citroën C4 HDi 110 es mucho más que un simple medio de transporte; es una experiencia. Es la elección perfecta para el conductor que valora la comodidad por encima de la deportividad y que aprecia un diseño con alma y personalidad. Un coche que, incluso años después, sigue girando cabezas y recordando una época en la que Citroën se atrevió a soñar. Conducirlo es un acto de afirmación, un refugio de confort y originalidad en un mundo automovilístico a menudo homogéneo.