Especificaciones y análisis del Citroën C4
Potencia
88CV
Par
133Nm
Consumo
6.4l/100
Emisiones
149g/km
0-100 km/h
12.8s
Vel. Máx.
182km/h
Peso
1257kg
Precio
10,570€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
320 L
60 L
65 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Citroën C4 5p LX 1.4i 16v 90cv (2010)
Descripción general
El Citroën C4 de 2008 irrumpió en el segmento de los compactos como una bocanada de aire fresco, un vehículo que se atrevía a ser diferente. No era solo un medio de transporte, sino una declaración de intenciones, un coche con alma y un carácter inconfundiblemente francés que te invitaba a redescubrir el placer de viajar sin prisas.
Experiencia de conducción
Al volante, sus 88 caballos te susurran una invitación a la calma. No busques una aceleración fulgurante, sino la suavidad de un motor voluntarioso y el placer de un viaje confortable. Su suspensión filtra las imperfecciones del asfalto con maestría, convirtiendo cada trayecto en una experiencia relajada y placentera, ideal para el día a día y escapadas tranquilas.
Diseño y estética
Su diseño es pura emoción y audacia. La silueta redondeada, con esa luneta trasera tan característica, lo distinguía de inmediato. Por dentro, la magia continuaba con su volante de buje fijo y la instrumentación digital central, una cabina que te envolvía en una atmósfera futurista y original, demostrando que un coche familiar no tiene por qué ser aburrido.
Tecnología y características
Citroën apostó por la innovación con soluciones que te hacían sentir en un coche del futuro. El volante de buje fijo, que mantenía los controles siempre en la misma posición, era una genialidad ergonómica. La pantalla translúcida central, que proyectaba la información sobre el salpicadero, era un detalle tecnológico que fascinaba y demostraba el espíritu vanguardista de la marca.
Competencia
En un mercado dominado por la sobriedad de rivales como el Volkswagen Golf o el Ford Focus, el C4 jugaba en otra liga. Luchaba contra el Renault Mégane por el trono del confort y la originalidad francesa, ofreciendo una alternativa para quienes buscaban un coche con una personalidad arrolladora, que se sintiera y se viera especial.
Conclusión
El Citroën C4 de esta generación es mucho más que un simple compacto. Es un refugio de confort, un ejercicio de diseño valiente y un compañero fiel para la vida cotidiana. Un coche que apela al corazón tanto como a la razón, dejando una huella imborrable en quienes aprecian la originalidad y el bienestar por encima de todo.




