Citroën C3 1.6i 16v SensoDrive VTR · 109 CV (2005)

2002
Gasolina
FWD
Automático 5v
Citroën C3 - Vista 1
Citroën C3 - Vista 2
Citroën C3 - Vista 3
Citroën C3 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Citroën C3

Potencia

109CV

Par

147Nm

Consumo

6.2l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

11.9s

Vel. Máx.

192km/h

Peso

1063kg

Precio

13,780

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

305 L

Depósito

45 L

Potencia

80 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima109 CV / 80 kW
Par máximo147 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito45 L
Maletero305 L

Análisis detallado del Citroën C3 1.6i 16v SensoDrive VTR · 109 CV (2005)

Descripción general

El Citroën C3 1.6i 16v SensoDrive VTR de 2002 es un vehículo que, a primera vista, nos invita a un viaje en el tiempo. Con su diseño peculiar y su enfoque en la comodidad, este coche se presentaba como una opción fresca y desenfadada en el segmento de los utilitarios. Su precio de 13.780 € en su momento, lo posicionaba como una alternativa interesante para quienes buscaban algo diferente, con un toque de distinción francesa.

Experiencia de conducción

Al volante del C3 1.6i 16v SensoDrive VTR, la sensación predominante es de suavidad y facilidad. El motor de 109 CV, aunque no es un derroche de potencia, se muestra suficiente para el día a día, permitiendo una conducción ágil en ciudad y solvente en carretera. La aceleración de 0 a 100 km/h en 11.9 segundos no es de infarto, pero cumple. La velocidad máxima de 192 km/h es más que adecuada. El cambio SensoDrive, un automático de 5 velocidades, busca la comodidad, aunque a veces puede resultar algo lento en sus transiciones, restando un poco de dinamismo a la experiencia. La suspensión, de tipo McPherson delante y rueda tirada con elemento torsional detrás, está claramente orientada al confort, absorbiendo bien las irregularidades del asfalto y ofreciendo un viaje placentero. La dirección asistida eléctrica, aunque no es la más comunicativa, facilita las maniobras en entornos urbanos. El consumo combinado de 6.2 l/100km es razonable para la época y el tipo de motor.

Diseño y estética

El diseño del Citroën C3 de 2002 es, sin duda, uno de sus puntos más característicos. Con sus formas redondeadas y su silueta de 'monovolumen en miniatura', se desmarcaba de la competencia. La carrocería de 5 puertas ofrecía una buena accesibilidad, y su tamaño compacto (3850 mm de largo, 1667 mm de ancho y 1519 mm de alto) lo hacía ideal para la ciudad. El maletero de 305 litros era bastante generoso para su segmento, lo que lo convertía en un compañero práctico para las compras o pequeñas escapadas. El interior, aunque con plásticos duros, estaba bien resuelto y ofrecía una buena habitabilidad para cuatro ocupantes, con un quinto asiento más justo. La estética VTR, aunque no se especifica en los datos, solía añadir un toque más deportivo con detalles específicos en el exterior y el interior.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Citroën C3 1.6i 16v SensoDrive VTR incorporaba elementos que, para su época, eran bastante avanzados. El motor de 1.6 litros y 16 válvulas, con inyección indirecta, ofrecía una buena eficiencia y un rendimiento adecuado. La transmisión SensoDrive, un cambio automático pilotado, era una de las apuestas de Citroën por la comodidad, permitiendo al conductor elegir entre un modo completamente automático o uno secuencial. Los frenos, con discos ventilados de 266 mm delante y discos de 247 mm detrás, garantizaban una frenada eficaz. La dirección asistida eléctrica contribuía a una conducción más relajada. Aunque no se detallan sistemas de infoentretenimiento avanzados, es de esperar que contara con los elementos básicos de la época, como radio CD y aire acondicionado.

Competencia

En el mercado de 2002, el Citroën C3 1.6i 16v SensoDrive VTR se enfrentaba a una dura competencia en el segmento de los utilitarios. Sus principales rivales incluían modelos como el Renault Clio, el Peugeot 206, el Ford Fiesta, el Opel Corsa o el Volkswagen Polo. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, ya fuera en diseño, prestaciones o equipamiento. El C3 se diferenciaba por su enfoque en la comodidad, su diseño original y la opción de la caja de cambios SensoDrive, que lo hacía atractivo para quienes buscaban una conducción más relajada en el tráfico urbano.

Conclusión

El Citroën C3 1.6i 16v SensoDrive VTR de 2002 fue un coche con personalidad, que apostó por un diseño diferente y una experiencia de conducción orientada al confort. Su motor de 109 CV, combinado con la caja SensoDrive, ofrecía un rendimiento adecuado para el día a día, aunque sin grandes alardes deportivos. Su habitabilidad y maletero lo hacían práctico, y su consumo era razonable. Fue una opción interesante para quienes buscaban un utilitario con un toque distintivo y una conducción relajada, destacando por su originalidad en un segmento muy competido. Un coche que, a pesar de los años, sigue evocando una sensación de simpatía y funcionalidad.