Especificaciones y análisis del Chevrolet Cruze
Potencia
125CV
Par
300Nm
Consumo
5.5l/100
Emisiones
145g/km
0-100 km/h
10s
Vel. Máx.
196km/h
Peso
-kg
Precio
17,170€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 4 puertas
450 L
60 L
92 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Chevrolet Cruze 2.0 VCDi 125 CV LS (2010-2011)
Descripción general
El Chevrolet Cruze irrumpió en el mercado europeo como una declaración de intenciones. No era solo una berlina más; era la visión global de Chevrolet materializada en un coche con alma americana y modales europeos. Con su motor diésel 2.0 VCDi de 125 CV, prometía un equilibrio perfecto entre la eficiencia necesaria para el día a día y la fuerza para sentir la carretera, todo ello envuelto en un paquete atractivo y a un precio que te hacía replantearte las opciones tradicionales.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del Cruze es descubrir una dualidad inesperada. El motor diésel de 2.0 litros, con sus generosos 300 Nm de par, empuja con una contundencia que sorprende y agrada desde bajas revoluciones. Se siente como un coche sólido, bien plantado sobre el asfalto, transmitiendo una sensación de seguridad y aplomo en autopista. Aunque su cambio manual de cinco velocidades no es el más refinado, conecta directamente con una mecánica robusta y dispuesta, haciendo de cada viaje una experiencia placentera y solvente.
Diseño y estética
El diseño del Cruze es pura audacia. Rompió moldes con una estética musculosa y una línea de techo descendente que le confería un aire de coupé. Su frontal, dominado por la imponente parrilla doble de Chevrolet, le otorgaba una presencia inconfundible en la carretera. Por dentro, el atrevimiento continuaba con un salpicadero simétrico y detalles como las inserciones textiles que recorrían el habitáculo, creando un ambiente acogedor y diferente que te hacía sentir en un coche con una personalidad muy marcada.
Tecnología y características
Más allá de pantallas y asistentes, la tecnología del Cruze residía en su corazón mecánico. El motor diésel con inyección por conducto común y turbo de geometría variable era una pieza de ingeniería solvente y eficaz para su tiempo. Su enfoque no estaba en los gadgets, sino en ofrecer una base sólida y fiable: un chasis bien equilibrado, una suspensión que absorbía las irregularidades con eficacia y una mecánica pensada para durar. Era tecnología al servicio de la conducción, no de la distracción.
Competencia
El Cruze se enfrentó sin complejos a gigantes establecidos como el Ford Focus Sedán, el Opel Astra Sedán o el Volkswagen Jetta. Mientras sus rivales europeos jugaban la carta de la tradición y el refinamiento, el Chevrolet apostó por un diseño más emocional, un motor diésel potente y una relación equipamiento-precio muy agresiva. Fue la alternativa para quienes buscaban salirse de lo convencional sin sacrificar la practicidad ni el rendimiento.
Conclusión
El Chevrolet Cruze 2.0 VCDi fue mucho más que una simple berlina asequible. Fue un coche con corazón, que ofrecía una experiencia de conducción honesta y gratificante, un diseño que giraba cabezas y una sensación de robustez general. Representó un valiente esfuerzo de Chevrolet por conquistar Europa, dejando una huella de coche fiable, capaz y con una personalidad que muchos de sus competidores más sobrios solo podían envidiar.




