Especificaciones y análisis del Cadillac BLS
Potencia
150CV
Par
320Nm
Consumo
6.7l/100
Emisiones
179g/km
0-100 km/h
11.5s
Vel. Máx.
195km/h
Peso
-kg
Precio
39,790€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 6v
FWD
5 / 5 puertas
419 L
58 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Cadillac BLS Wagon 1.9D 150cv Sport Aut. 6 vel. (2008-2009)
Descripción general
El Cadillac BLS Wagon fue un audaz intento de la marca americana por conquistar el corazón de Europa. Un familiar premium que fusionaba el inconfundible y afilado diseño de Cadillac con una plataforma de origen sueco, la del Saab 9-3. Es un coche que evoca una sensación de exclusividad y rareza, una pieza de la historia del motor que se atrevió a ser diferente en un mercado dominado por la sobriedad alemana.
Experiencia de conducción
Al volante, el BLS Wagon se siente como un viajero incansable. Su motor diésel de 150 caballos, de origen Fiat-GM, empuja con solvencia suficiente para largos trayectos por autopista, donde la caja automática de 6 velocidades trabaja con suavidad para ofrecer un confort de marcha notable. No es un deportivo, su aceleración es progresiva y tranquila, pero su chasis, heredado de Saab, transmite una gran sensación de aplomo y seguridad. Es un coche para devorar kilómetros sintiendo el asfalto con una compostura y estabilidad que invitan a la calma.
Diseño y estética
Su estética es su gran carta de presentación. Las líneas rectas y angulosas, tan características de Cadillac, crean una silueta imponente y llena de carácter que no deja a nadie indiferente. La carrocería familiar le añade una versatilidad que complementa su estilo único. Por dentro, la herencia de General Motors es más evidente, con un diseño funcional y bien equipado para su época, aunque sin el nivel de opulencia que su exterior podría sugerir. Es un habitáculo que te acoge con comodidad, pero donde la emoción se centra más en el viaje que en el lujo de los materiales.
Tecnología y características
Para ser un coche de 2008, el BLS Wagon ofrecía un equipamiento correcto y centrado en el confort. La transmisión automática, el climatizador o un sistema de sonido de calidad eran parte de su dotación. Sin embargo, se percibe como un vehículo de una generación anterior a la revolución digital. Carece de las pantallas táctiles y los asistentes de conducción modernos, ofreciendo a cambio una experiencia más analógica y directa, donde la tecnología está al servicio de la conducción sin distracciones.
Competencia
Se enfrentó a una competencia formidable, la realeza de los familiares premium europeos. El Audi A4 Avant, el BMW Serie 3 Touring y el Mercedes-Benz Clase C Estate eran los reyes indiscutibles del segmento. Su rival más directo, y hermano de plataforma, era el Saab 9-3 SportHatch. El BLS luchó por hacerse un hueco con su estilo diferenciador, pero le resultó difícil competir contra la imagen de marca y la perfección de ingeniería de sus adversarios alemanes.
Conclusión
El Cadillac BLS Wagon es una elección para el corazón, para quien busca un coche práctico y fiable pero con un alma diferente y una estética que rompe moldes. Es la perfecta combinación de la robustez de una mecánica europea contrastada y el exotismo del diseño americano. No es el más rápido ni el más lujoso, pero posee un encanto especial y una exclusividad que lo convierten en un futuro clásico. Conducirlo es una declaración de intenciones, un tributo a una época en la que las marcas todavía se atrevían a soñar.