Especificaciones y análisis del BMW Z4
Potencia
177CV
Par
230Nm
Consumo
8.4l/100
Emisiones
202g/km
0-100 km/h
7.7s
Vel. Máx.
225km/h
Peso
1375kg
Precio
40,481€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 6v
RWD
2 / 2 puertas
260 L
55 L
130 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del BMW Z4 Roadster 2.5i Aut. · 177 CV (2008)
Descripción general
El BMW Z4 Roadster de 2008 es la encarnación de la libertad sobre cuatro ruedas. Un biplaza que destila la esencia pura de la conducción, combinando un motor de seis cilindros en línea atmosférico con un chasis ágil y una estética que rompió moldes. Es un coche que no solo te transporta, sino que te hace sentir cada kilómetro como una experiencia única e irrepetible.
Experiencia de conducción
Conducir este Z4 es una sinfonía para los sentidos. El rugido melódico del motor de 2.5 litros al subir de vueltas es adictivo, una banda sonora que se disfruta mejor a cielo abierto. La posición de conducción baja, casi sobre el eje trasero, te conecta directamente con el asfalto, sintiendo cada curva. La tracción trasera te invita a jugar, ofreciendo un comportamiento noble pero emocionante, mientras que la caja automática de 6 velocidades aporta una comodidad que no resta un ápice de su carácter deportivo. Es la pura alegría de conducir.
Diseño y estética
El diseño de Chris Bangle, con su lenguaje 'flame surfacing', fue polémico en su día pero hoy se revela como una obra de arte atemporal. El larguísimo capó, la zaga corta y musculosa, y las líneas fluidas que juegan con la luz crean una silueta inconfundible y agresiva. Es un coche que parece estar en movimiento incluso cuando está parado, una escultura rodante que sigue capturando miradas y despertando pasiones.
Tecnología y características
En su corazón tecnológico late la ingeniería de BMW. Aunque no destaca por pantallas o asistentes modernos, su tecnología se centra en la experiencia de conducción. La dirección con asistencia eléctrica, el motor de aluminio y magnesio para aligerar peso, y un chasis afinado con suspensiones independientes son la prueba de que la mejor tecnología es la que te hace sonreír en una carretera de curvas. La capota de lona eléctrica te permite pasar de la intimidad de un coupé a la libertad de un descapotable en segundos.
Competencia
En su época, el Z4 se enfrentó a titanes del segmento. El Porsche Boxster ofrecía una dinámica exquisita con su motor central. El Mercedes-Benz SLK apostaba por el confort y la versatilidad de su techo duro retráctil. El Audi TT Roadster seducía con su diseño vanguardista y la opción de tracción total Quattro, mientras que el Mazda MX-5, aunque menos potente, siempre ha sido el referente en agilidad y diversión.
Conclusión
El BMW Z4 2.5i no es simplemente un coche, es una declaración de intenciones. Es un vehículo para puristas, para quienes valoran el sonido de un motor atmosférico, la conexión mecánica y la sensación del viento. Hoy, se erige como un futuro clásico, una máquina emocional que nos recuerda una época dorada del automovilismo. Adquirir uno no es una decisión racional, es una decisión del corazón que promete recompensar con innumerables momentos de felicidad al volante.




