Especificaciones y análisis del BMW Serie 5
Potencia
163CV
Par
350Nm
Consumo
7l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
-s
Vel. Máx.
215km/h
Peso
1760kg
Precio
39,889€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
RWD
5 / 5 puertas
410 L
70 L
120 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del BMW 525d Touring · 163 CV (2000)
Descripción general
El BMW 525d Touring de 1997 es un vehículo que encarna la esencia de la elegancia y la funcionalidad de la marca bávara. Con su motor diésel de seis cilindros y 163 CV, este familiar ofrecía una combinación atractiva de rendimiento y eficiencia para la época. Su diseño atemporal y la calidad de construcción lo convertían en una opción deseable para aquellos que buscaban un coche espacioso y con un toque deportivo.
Experiencia de conducción
Al volante del 525d Touring, la sensación de solidez y aplomo es inmediata. El motor diésel, con sus 163 CV y 350 Nm de par, entrega una respuesta contundente desde bajas revoluciones, permitiendo una conducción ágil tanto en ciudad como en carretera. La caja de cambios manual de 5 velocidades, precisa y bien escalonada, contribuye a una experiencia de conducción gratificante. La suspensión, aunque firme, filtra eficazmente las irregularidades del terreno, ofreciendo un equilibrio notable entre confort y dinamismo. La dirección, comunicativa y directa, invita a disfrutar de cada curva, mientras que los frenos, con discos ventilados delanteros y discos traseros, garantizan una detención segura y eficaz. Es un coche que transmite confianza y placer al conducir, incluso en viajes largos.
Diseño y estética
El diseño del BMW Serie 5 Touring de 1997 es un clásico atemporal. Sus líneas fluidas y elegantes, combinadas con la característica parrilla de doble riñón de BMW, le otorgan una presencia distinguida y deportiva. La carrocería familiar, lejos de restar atractivo, añade un toque de versatilidad sin comprometer la estética. Los faros delanteros, con su diseño característico, y las proporciones equilibradas del conjunto, hacen que este coche siga siendo atractivo a la vista hoy en día. El interior, sobrio y funcional, está construido con materiales de alta calidad, reflejando la atención al detalle típica de BMW.
Tecnología y características
A pesar de ser un modelo de finales de los 90, el BMW 525d Touring incorporaba tecnología avanzada para su tiempo. Su motor diésel de 2.5 litros y seis cilindros en línea destacaba por su inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, elementos que contribuían a su rendimiento y eficiencia. La tracción trasera, un sello distintivo de BMW, garantizaba un comportamiento dinámico y deportivo. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco en las cuatro ruedas, con los delanteros ventilados, y estabilizadoras tanto en el eje delantero como en el trasero, lo que mejoraba la estabilidad y el control del vehículo.
Competencia
En su segmento, el BMW 525d Touring competía con otros familiares premium de la época, como el Mercedes-Benz Clase E Estate y el Audi A6 Avant. Frente a ellos, el BMW destacaba por su enfoque más deportivo en la conducción, su motor diésel potente y refinado, y su diseño elegante y atemporal. Si bien sus rivales ofrecían un confort similar y una calidad de construcción comparable, el BMW se diferenciaba por esa chispa extra en el dinamismo y la conexión con la carretera que siempre ha caracterizado a la marca.
Conclusión
El BMW 525d Touring de 1997 es un coche que ha sabido envejecer con dignidad. Su combinación de un motor diésel potente y eficiente, un diseño elegante y funcional, y una dinámica de conducción gratificante lo convierten en un clásico moderno. Es un vehículo que ofrece espacio, confort y un toque de deportividad, ideal para aquellos que buscan un coche con carácter y la calidad inherente a la marca BMW. Un verdadero placer para los amantes de la conducción y la ingeniería alemana.