BMW 318d Berlina · 116 CV (2003-2005)

1998
Gasóleo
RWD
Manual 5v
BMW Serie 3 - Vista 1
BMW Serie 3 - Vista 2
BMW Serie 3 - Vista 3
BMW Serie 3 - Vista 4

Especificaciones y análisis del BMW Serie 3

Potencia

116CV

Par

280Nm

Consumo

5.6l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

10.6s

Vel. Máx.

204km/h

Peso

1470kg

Precio

28,800

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 5v

Tracción

RWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

440 L

Depósito

63 L

Potencia

85 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima116 CV / 85 kW
Par máximo280 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito63 L
Maletero440 L

Análisis detallado del BMW 318d Berlina · 116 CV (2003-2005)

Descripción general

El BMW Serie 3 de 1998, en su versión 318d Berlina, es un vehículo que encarna la esencia de la marca bávara en una época de transición. Con un motor diésel de 116 CV, este modelo buscaba ofrecer una combinación de eficiencia y el placer de conducción característico de BMW, todo ello envuelto en una carrocería berlina elegante y funcional. Su precio de 28.800 euros en su momento lo posicionaba como una opción atractiva para quienes buscaban un coche premium con un coste de uso contenido.

Experiencia de conducción

Al volante del BMW 318d Berlina, la experiencia es típicamente BMW. La dirección precisa y la suspensión bien ajustada, con McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, ofrecen un equilibrio notable entre confort y dinamismo. Aunque sus 116 CV no lo convierten en un bólido, la entrega de par de 280 Nm desde bajas revoluciones (1750 rpm) asegura una respuesta ágil en la mayoría de situaciones. Acelera de 0 a 100 km/h en 10.6 segundos y alcanza una velocidad máxima de 204 km/h, cifras respetables para su segmento y época. La caja de cambios manual de 5 velocidades es suave y precisa, contribuyendo a una conducción placentera. El consumo combinado de 5.6 l/100km es un punto fuerte, haciendo de este diésel una opción económica para el día a día y los viajes largos.

Diseño y estética

El diseño del BMW Serie 3 de 1998 es atemporal y elegante, con las líneas clásicas que definieron a la marca durante años. La carrocería berlina de cuatro puertas, con sus 4471 mm de largo, 1739 mm de ancho y 1415 mm de alto, proyecta una imagen de solidez y deportividad contenida. Los detalles como los faros dobles y la parrilla de doble riñón son inconfundiblemente BMW. El interior, aunque sobrio, está bien construido y ofrece una ergonomía pensada para el conductor, con materiales de calidad que resisten bien el paso del tiempo. El maletero de 440 litros es práctico para el uso diario y los viajes familiares.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el BMW 318d de 1998 incorporaba soluciones avanzadas para su tiempo. Su motor diésel de 1995 cc con inyección directa por conducto común, turbo e intercooler, era un ejemplo de eficiencia y rendimiento. La construcción del motor, con bloque de hierro y culata de aluminio, buscaba optimizar la durabilidad y el peso. La tracción trasera, un sello distintivo de BMW, garantizaba una dinámica de conducción superior. Aunque carecía de las ayudas electrónicas más sofisticadas de los modelos actuales, su chasis bien afinado y los frenos de disco ventilados en ambos ejes (286 mm delante y 276 mm detrás) ofrecían un control y una seguridad adecuados para la época.

Competencia

En su segmento, el BMW 318d Berlina de 1998 competía con modelos como el Mercedes-Benz Clase C, el Audi A4 y el Volkswagen Passat. Frente a ellos, el BMW destacaba por su enfoque en la deportividad y el placer de conducción, gracias a su tracción trasera y su chasis equilibrado. Mientras que el Mercedes-Benz ofrecía un mayor confort y el Audi una tracción delantera o integral más segura en ciertas condiciones, el BMW se posicionaba como la opción para los entusiastas de la conducción que no querían renunciar a la eficiencia de un diésel.

Conclusión

El BMW 318d Berlina de 1998 es un coche que, a pesar de los años, sigue siendo un referente de lo que BMW representa: una combinación de elegancia, dinamismo y eficiencia. Su motor diésel, aunque no es el más potente, ofrece un rendimiento más que suficiente para el día a día y un consumo muy contenido. Es un coche que invita a conducir, con una dirección precisa y un chasis que transmite confianza. Para aquellos que buscan un clásico moderno con un toque de deportividad y la fiabilidad de la marca, este Serie 3 sigue siendo una opción muy interesante.