Especificaciones y análisis del Audi TT
Potencia
200CV
Par
280Nm
Consumo
7.8l/100
Emisiones
186g/km
0-100 km/h
6.5s
Vel. Máx.
237km/h
Peso
1390kg
Precio
41,780€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 6v
FWD
2 / 2 puertas
250 L
55 L
147 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Audi TT Roadster 2.0 T FSI S tronic · 200 CV (2006-2008)
Descripción general
El Audi TT Roadster de 2007 no es solo un coche, es una declaración de intenciones. Representa la libertad encapsulada en un diseño icónico, una invitación a sentir el viento y el sol mientras se disfruta de una conducción pura y emocionante. Con su motor 2.0 TFSI de 200 caballos y la rapidísima caja S tronic, cada trayecto se convierte en una experiencia memorable, un pequeño lujo diario que redefine el placer de conducir.
Experiencia de conducción
Al volante, el TT Roadster es pura adrenalina controlada. El motor 2.0 TFSI empuja con una contundencia sorprendente desde muy bajas vueltas, catapultándote de 0 a 100 km/h en solo 6.5 segundos. La caja de cambios S tronic de doble embrague es una maravilla de la ingeniería, ofreciendo cambios de marcha instantáneos y casi imperceptibles que te mantienen pegado al asiento. Su chasis ágil y la dirección precisa transmiten una confianza absoluta, permitiéndote trazar curvas con una facilidad pasmosa. Es un coche que te habla, que te conecta con el asfalto y te hace sentir cada kilómetro como si fuera el primero.
Diseño y estética
El diseño del Audi TT Roadster de segunda generación es una obra de arte atemporal. Sus líneas fluidas y musculosas, inspiradas en la Bauhaus, crean una silueta inconfundible que sigue girando cabezas. Es compacto, atlético y elegante, una combinación perfecta de agresividad y sofisticación. Al abrir la puerta, te recibe un habitáculo que es un ejemplo de minimalismo y ergonomía, centrado completamente en el conductor. Los materiales de alta calidad y los ajustes perfectos crean una atmósfera premium que te envuelve y te hace sentir en un lugar especial, un cockpit diseñado para el puro disfrute.
Tecnología y características
Para su época, el TT Roadster era un escaparate tecnológico. El corazón de la bestia, el motor TFSI, combinaba la inyección directa de gasolina con la turboalimentación, una fórmula que ofrecía un rendimiento brillante con una eficiencia sorprendente. La transmisión S tronic de doble embrague, heredada de la competición, era un salto cuántico frente a los automáticos convencionales. A esto se sumaba una dirección con asistencia eléctrica y un chasis afinado que demostraba que la tecnología no solo estaba para el confort, sino para intensificar cada sensación al volante.
Competencia
En un mercado competido, el Audi TT Roadster se enfrentaba a rivales de la talla del BMW Z4 y el Mercedes-Benz SLK. Mientras el Z4 ofrecía una experiencia de conducción más cruda y el SLK apostaba por el confort y su techo duro retráctil, el TT encontraba su propio espacio. Ofrecía un equilibrio magistral entre deportividad, diseño vanguardista y usabilidad diaria, todo ello envuelto en la calidad de construcción impecable de Audi. Era la elección para quien buscaba un deportivo con un alma tecnológica y un diseño que trascendía las modas.
Conclusión
El Audi TT Roadster 2.0 TFSI S tronic es mucho más que un coche deportivo de su tiempo; es una experiencia sensorial sobre ruedas. Combina un diseño que enamora, un motor que emociona y una calidad que perdura. Es un vehículo que invita a escapar de la rutina, a buscar carreteras secundarias y a disfrutar del simple placer de conducir a cielo abierto. Hoy, se postula como un futuro clásico, una inversión en felicidad y en recuerdos imborrables al volante.




