Audi R8 Spyder 4.2 FSI quattro · 430 CV (2010-2012)

2010
Gasolina
AWD
Manual 6v
Audi R8 - Vista 1
Audi R8 - Vista 2
Audi R8 - Vista 3
Audi R8 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Audi R8

Potencia

430CV

Par

430Nm

Consumo

14.4l/100

Emisiones

337g/km

0-100 km/h

4.8s

Vel. Máx.

300km/h

Peso

1735kg

Precio

142,390

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 6v

Tracción

AWD

Plazas

2 / 2 puertas

Maletero

100 L

Depósito

80 L

Potencia

316 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima430 CV / 316 kW
Par máximo430 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito80 L
Maletero100 L

Análisis detallado del Audi R8 Spyder 4.2 FSI quattro · 430 CV (2010-2012)

Descripción general

El Audi R8 Spyder 4.2 FSI quattro de 2010 es una obra de arte automotriz que combina la emoción de un superdeportivo con la libertad de un descapotable. Con su motor V8 central trasero y tracción integral, este coche no es solo un medio de transporte, sino una declaración de intenciones, una máquina diseñada para cautivar los sentidos y ofrecer una experiencia de conducción inolvidable. Su precio de 142.390 € en su lanzamiento reflejaba su exclusividad y el nivel de ingeniería que Audi puso en cada detalle.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del R8 Spyder es sumergirse en un mundo de sensaciones puras. El motor 4.2 FSI, con sus 430 CV, ruge con una melodía embriagadora que se amplifica al bajar la capota. La aceleración de 0 a 100 km/h en 4.8 segundos es contundente, pegándote al asiento mientras el paisaje se difumina. La caja de cambios manual de 6 velocidades ofrece un control total, permitiendo al conductor sentir cada cambio y exprimir al máximo el potencial del motor. La tracción quattro proporciona una adherencia excepcional, inspirando confianza en cada curva y permitiendo una conducción deportiva y segura. Es un coche que te hace sentir vivo, que te conecta con la carretera de una manera visceral y emocionante.

Diseño y estética

El diseño del Audi R8 Spyder es atemporal y espectacular. Sus líneas fluidas y agresivas, combinadas con la elegancia de un descapotable, lo convierten en un imán para las miradas. La silueta baja y ancha, las tomas de aire laterales y la distintiva parrilla Singleframe de Audi le otorgan una presencia imponente. La capota de lona se integra perfectamente en el diseño, y su mecanismo de apertura y cierre es un espectáculo en sí mismo. Cada elemento, desde los faros LED hasta las llantas de 19 pulgadas, contribuye a una estética que es a la vez deportiva y sofisticada, un verdadero icono de estilo.

Tecnología y características

Bajo su piel seductora, el R8 Spyder esconde una ingeniería de vanguardia. El motor V8 FSI, con inyección directa y admisión variable, es una joya tecnológica que ofrece un rendimiento excepcional. La tracción integral quattro, sello distintivo de Audi, garantiza una distribución óptima de la potencia en cualquier situación. La suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes, junto con los frenos de disco ventilados de gran tamaño (380 mm delante y 356 mm detrás), aseguran un comportamiento dinámico y una capacidad de frenado a la altura de sus prestaciones. Aunque no cuenta con las últimas asistencias a la conducción de hoy en día, su tecnología se centra en la pureza de la experiencia de conducción.

Competencia

En su momento, el Audi R8 Spyder 4.2 FSI quattro se enfrentaba a rivales de la talla del Porsche 911 Carrera S Cabriolet, el Mercedes-Benz SLS AMG Roadster o el Ferrari California. Cada uno ofrecía su propia interpretación del superdeportivo descapotable, pero el R8 destacaba por su equilibrio entre deportividad, usabilidad diaria y un diseño que, sin ser tan extravagante como el de algunos de sus competidores italianos, era innegablemente atractivo y sofisticado. Su tracción integral le daba una ventaja en ciertas condiciones, ofreciendo una versatilidad que otros no podían igualar.

Conclusión

El Audi R8 Spyder 4.2 FSI quattro de 2010 es más que un coche; es una experiencia, una declaración de pasión por la conducción. Su combinación de un motor V8 atmosférico, una caja de cambios manual, tracción quattro y la posibilidad de disfrutar del cielo abierto lo convierte en un clásico instantáneo. Es un coche que te invita a conducir, a sentir, a vivir cada kilómetro con intensidad. Un verdadero icono que sigue emocionando a quienes tienen el privilegio de ponerse a sus mandos.