Especificaciones y análisis del Audi R8
Potencia
525CV
Par
530Nm
Consumo
13.9l/100
Emisiones
326g/km
0-100 km/h
3.9s
Vel. Máx.
316km/h
Peso
1700kg
Precio
167,610€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 6v
AWD
2 / 2 puertas
100 L
90 L
386 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Audi R8 5.2 FSI quattro R tronic · 525 CV (2010-2012)
Descripción general
El Audi R8 5.2 FSI quattro de 2010 no es solo un coche, es la materialización de un sueño. Representa la audaz incursión de Audi en el territorio de los superdeportivos, pero con una filosofía única: la usabilidad diaria. Tomando la aclamada base del R8 original, Audi implantó un corazón salvaje, un V10 atmosférico de 5.2 litros, elevando las prestaciones y las emociones a un nivel estratosférico y creando un icono instantáneo.
Experiencia de conducción
Pulsar el botón de arranque es despertar a una bestia. El bramido del V10, justo detrás de tu nuca, es una adicción visceral que te eriza la piel. Cada aceleración es un golpe de autoridad, un empuje brutal que te pega al asiento mientras el cuentarrevoluciones escala frenéticamente hasta las 8000 rpm. La tracción quattro te da una confianza casi divina para trazar curvas, sintiendo cómo el coche se aferra al asfalto con una tenacidad increíble. La caja R tronic, con su carácter mecánico y algo tosco, te hace partícipe de cada cambio, conectándote de una forma pura y sin filtros a una máquina que parece tener alma.
Diseño y estética
Su silueta es una obra de arte atemporal. Walter de Silva creó una escultura que, más de una década después, sigue girando cabezas y provocando suspiros. Es bajo, ancho y musculoso, con una presencia imponente. Los icónicos 'sideblades' laterales no son solo un adorno, sino una seña de identidad que rompe la línea y acentúa su configuración de motor central. Ver ese glorioso V10 expuesto bajo la luneta trasera es un espectáculo en sí mismo, una declaración de intenciones que fusiona la belleza con la ingeniería más pura.
Tecnología y características
Bajo su piel de aluminio se esconde la vanguardia de su época. La carrocería Audi Space Frame (ASF) le otorga una ligereza y rigidez excepcionales, fundamentales para su comportamiento dinámico. El legendario sistema de tracción total quattro es el alma de su eficacia, capaz de transmitir los 525 caballos al suelo con una motricidad pasmosa en cualquier condición. El motor V10 con inyección directa FSI es una joya de la ingeniería, potente y elástico, mientras que la suspensión magnética adaptativa le permite ser un deportivo radical en circuito y un compañero sorprendentemente dócil en la ciudad.
Competencia
En su momento, el Audi R8 V10 se enfrentó a titanes como el Lamborghini Gallardo, con el que compartía motor, el Ferrari 458 Italia y el Porsche 911 Turbo. Sin embargo, el R8 jugó una carta diferente. Mientras sus rivales italianos exigían más sacrificios, el Audi ofrecía un nivel de confort, ergonomía y facilidad de uso inaudito en su segmento. Era el superdeportivo que podías usar para ir a trabajar sin sentir que estabas domando a una fiera indomable, pero que se transformaba en una en cuanto se lo pedías.
Conclusión
El Audi R8 5.2 FSI es mucho más que la suma de sus partes. Es el canto de cisne de una era, la de los grandes motores atmosféricos. Es la prueba de que se puede crear un superdeportivo emocionante, con un sonido de Fórmula 1 y un diseño de museo, sin renunciar a la lógica y la calidad alemanas. Conducirlo es una experiencia inolvidable, una conexión mecánica y emocional que los coches modernos rara vez pueden ofrecer. No es solo un coche, es una leyenda y un clásico de futuro garantizado.




