Audi A8 L 4.2 quattro tiptronic 6 vel. · 334 CV (2005-2006)

2003
Gasolina
AWD
Automático 6v
Audi A8 - Vista 1
Audi A8 - Vista 2
Audi A8 - Vista 3
Audi A8 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Audi A8

Potencia

334CV

Par

430Nm

Consumo

11.9l/100

Emisiones

286g/km

0-100 km/h

6.4s

Vel. Máx.

250km/h

Peso

1850kg

Precio

93,540

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 6v

Tracción

AWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

500 L

Depósito

90 L

Potencia

246 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima334 CV / 246 kW
Par máximo430 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 6v

Capacidades

Depósito90 L
Maletero500 L

Análisis detallado del Audi A8 L 4.2 quattro tiptronic 6 vel. · 334 CV (2005-2006)

Descripción general

El Audi A8 L 4.2 quattro de 2005 no es simplemente una berlina de lujo, es la materialización de la ambición de Audi por dominar la cima del automovilismo. Con su imponente carrocería alargada, un corazón V8 de 4.2 litros latiendo con 334 caballos y la legendaria tracción total quattro, este coche representaba el pináculo del poder, el confort y la tecnología de su tiempo, un verdadero buque insignia diseñado para viajar en primera clase sobre el asfalto.

Experiencia de conducción

Conducir este A8 L es una experiencia que aísla del mundo exterior para sumergirte en un oasis de serenidad y potencia. El empuje del motor V8 es contundente pero increíblemente refinado, una ola de par que te lanza hacia adelante sin el más mínimo atisbo de brusquedad. La suspensión neumática adaptativa convierte el asfalto más roto en una suave alfombra, mientras la tracción quattro transmite una sensación de seguridad y aplomo inquebrantables, sin importar las condiciones. Es la sensación de tener un poder ilimitado bajo el pie derecho, gestionado con una suavidad y un silencio que rozan la perfección.

Diseño y estética

Su diseño es un ejercicio de elegancia atemporal y poder contenido. Lejos de la ostentación, el A8 L seduce con líneas limpias, una silueta majestuosa y proporcionada, y la revolucionaria parrilla Singleframe que definiría la identidad de Audi. La construcción en aluminio Audi Space Frame no solo es una proeza técnica, sino que contribuye a una presencia visual más ligera y atlética. Cada detalle, desde el ajuste de los paneles hasta la calidad de la pintura, respira una calidad constructiva que emociona al observarlo y tocarlo.

Tecnología y características

En su momento, este A8 era una vitrina tecnológica sobre ruedas. El sistema de infoentretenimiento MMI centralizaba el control del vehículo de una forma intuitiva y pionera. La suspensión neumática adaptativa no solo garantizaba un confort supremo, sino que ajustaba la altura y dureza para optimizar la dinámica. La tracción quattro, un sello de la casa, y su avanzada estructura de aluminio eran la base de su excepcional comportamiento. Era un coche que se adelantaba a su tiempo, haciendo que la tecnología más compleja trabajara en silencio para hacer cada viaje más seguro y placentero.

Competencia

En el olimpo de las grandes berlinas, el Audi A8 L se enfrentaba a dos titanes alemanes. Por un lado, el Mercedes-Benz Clase S, el eterno referente en lujo y confort absoluto. Por otro, el BMW Serie 7, que siempre defendió su trono como la opción más dinámica y enfocada al placer de conducir. El A8 se posicionó inteligentemente como la alternativa sofisticada y tecnológica, ofreciendo un equilibrio magistral entre ambos mundos y añadiendo el factor diferencial de la tracción total quattro, un argumento imbatible en seguridad activa.

Conclusión

El Audi A8 L 4.2 quattro es mucho más que un coche de lujo de su época; es una declaración de principios de ingeniería y buen gusto. Representa la culminación de la filosofía 'A la vanguardia de la técnica', un vehículo que envuelve a sus ocupantes en un ambiente de lujo discreto mientras ofrece un rendimiento y una seguridad excepcionales. Conducirlo es sentir el legado de una marca que no temía desafiar a los mejores, creando una obra maestra que, aún hoy, sigue transmitiendo una profunda sensación de calidad, poder y sofisticación.