Especificaciones y análisis del Audi A8
Potencia
450CV
Par
580Nm
Consumo
13.9l/100
Emisiones
324g/km
0-100 km/h
5.2s
Vel. Máx.
250km/h
Peso
2070kg
Precio
140,060€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 6v
AWD
5 / 4 puertas
500 L
90 L
331 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Audi A8 L 6.0 quattro tiptronic · 450 CV (2008-2009)
Descripción general
El Audi A8 L 6.0 quattro de 2008 no es simplemente una berlina de lujo; es la máxima expresión de la ingeniería y el poderío de Audi en su época. Un vehículo que combina la opulencia de una limusina con el corazón de un superdeportivo, gracias a su majestuoso motor W12. Representa un viaje en primera clase sobre el asfalto, donde cada kilómetro es una declaración de estatus y sofisticación.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del A8 L 6.0 es una experiencia que redefine el concepto de poder. Los 450 CV del motor de 12 cilindros se entregan con una suavidad abrumadora, un empuje lineal e inagotable que te pega al asiento sin el más mínimo atisbo de brusquedad. La tracción quattro transmite una seguridad total, permitiendo devorar curvas con una agilidad impensable para una berlina de su tamaño. El silencio a bordo es casi absoluto, una burbuja de confort que te aísla del mundo exterior mientras el paisaje pasa a una velocidad vertiginosa.
Diseño y estética
Su diseño es un ejercicio de elegancia atemporal y poder contenido. La carrocería larga, con sus líneas fluidas y proporciones perfectas, proyecta una imagen de autoridad y prestigio sin caer en la ostentación. Es un coche que impone respeto por su presencia, no por sus adornos. En el interior, el lujo se palpa en cada detalle: maderas nobles, cueros exquisitos y ajustes milimétricos que crean una atmósfera de exclusividad y bienestar incomparables. Es un santuario de lujo artesanal.
Tecnología y características
Para su tiempo, el A8 L era una proeza tecnológica. Su chasis de aluminio, el Audi Space Frame, le otorgaba una ligereza y rigidez estructural sobresalientes. La suspensión neumática adaptativa no solo garantizaba un confort sublime, sino que también ajustaba la altura y dureza para optimizar la dinámica en cualquier situación. El sistema de tracción integral quattro, un sello de la casa, y la avanzada interfaz MMI demostraban que el lujo y la tecnología de vanguardia podían ir de la mano para crear una experiencia de conducción superior.
Competencia
En el olimpo de las grandes berlinas, el A8 L 6.0 se medía con titanes como el Mercedes-Benz Clase S 600 y el BMW 760Li. Frente a la opulencia clásica de Mercedes y el enfoque más dinámico de BMW, el Audi A8 ofrecía un equilibrio único. Su carta de presentación era la tracción total quattro, que le confería una seguridad y motricidad superiores en cualquier clima, y una construcción ligera en aluminio que refinaba su comportamiento. Era la elección para quien buscaba tecnología, discreción y un rendimiento imperturbable.
Conclusión
El Audi A8 L 6.0 quattro es mucho más que un coche; es una obra maestra de la ingeniería alemana, un símbolo de poder y refinamiento. Una berlina que te transporta con la suavidad de una alfombra voladora y la contundencia de un tren de alta velocidad. Aunque su consumo y mantenimiento son acordes a su exclusividad, la experiencia de poseer y conducir esta joya mecánica es algo que trasciende lo racional, dejando una huella imborrable en la memoria de quien tiene el privilegio de disfrutarlo.