Especificaciones y análisis del Audi A8
Potencia
260CV
Par
330Nm
Consumo
10.9l/100
Emisiones
262g/km
0-100 km/h
7.7s
Vel. Máx.
250km/h
Peso
1860kg
Precio
75,330€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 6v
AWD
5 / 4 puertas
500 L
90 L
191 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Audi A8 3.2 FSI quattro tiptronic · 260 CV (2007-2008)
Descripción general
El Audi A8 de 2008 es la encarnación del lujo y la soberanía tecnológica de la marca de los cuatro aros. En esta versión 3.2 FSI, la berlina de representación combina la suavidad de un motor V6 atmosférico con la seguridad inquebrantable de la tracción total quattro, creando una experiencia de viaje en primera clase que trasciende el simple acto de conducir.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del A8 es aislarse del mundo exterior. El motor de 260 caballos empuja con una progresividad sedosa, sin vibraciones, acompañado por el cambio Tiptronic que gestiona las marchas de forma casi imperceptible. La sensación de aplomo es absoluta; la tracción quattro se aferra al asfalto con una tenacidad que inspira una confianza total, convirtiendo cada curva en una demostración de poder y control. No es un deportivo, es un devorador de autopistas que te mece en un silencio casi total, haciendo que los viajes más largos parezcan un suspiro.
Diseño y estética
Su diseño es una lección de elegancia atemporal. Las líneas fluidas y la imponente parrilla Singleframe crean una silueta que denota prestigio sin caer en la ostentación. Con más de cinco metros de longitud, su presencia es majestuosa. El interior es un santuario donde la calidad se puede tocar. Cada botón, cada inserción de aluminio y cada costura del cuero transmiten una sensación de artesanía y solidez que emociona. Es un espacio diseñado no solo para conducir, sino para ser disfrutado, un refugio de confort y buen gusto.
Tecnología y características
En su época, el A8 era una vitrina tecnológica. El sistema MMI centralizaba el control del vehículo en una interfaz intuitiva, algo avanzado para 2008. La suspensión neumática adaptativa, un sello de identidad del modelo, permitía variar la altura y dureza, logrando un equilibrio mágico entre confort y dinamismo. La dirección Servotronic, sensible a la velocidad, y por supuesto, el avanzado sistema de tracción quattro, eran pilares tecnológicos que definían su carácter superior y su comportamiento dinámico y seguro.
Competencia
En el olimpo de las berlinas de lujo, el A8 se medía con titanes como el Mercedes-Benz Clase S y el BMW Serie 7. Mientras el Clase S era el rey del confort y la innovación suntuosa, y el Serie 7 ofrecía una experiencia de conducción más visceral, el Audi A8 jugaba su propia carta. Se distinguía por su tracción quattro, que le otorgaba una versatilidad única, y por su construcción ligera en aluminio, ofreciendo un equilibrio perfecto entre elegancia, seguridad y una dinámica de conducción refinada.
Conclusión
El Audi A8 3.2 FSI quattro no es solo un coche, es una declaración de intenciones. Es la elección de quien valora la ingeniería sublime, la seguridad total y un lujo discreto pero profundo. Conducirlo es sentir el legado de una marca que domina la técnica y el diseño. Aunque su motor V6 no tenga la explosividad de sus hermanos mayores, ofrece una armonía y un equilibrio que enamoran en el día a día. Es una máquina que crea un vínculo emocional, un compañero de viaje fiel que convierte cada trayecto en una experiencia memorable.




