Audi A7 Sportback 2.8 FSI quattro S tronic 7 vel. · 204 CV (2010-2011)

2011
Gasolina
AWD
Automático 7v
Audi A7 - Vista 1
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Audi A7 - Vista 3
Audi A7 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Audi A7

Potencia

204CV

Par

280Nm

Consumo

8l/100

Emisiones

187g/km

0-100 km/h

8.3s

Vel. Máx.

235km/h

Peso

1795kg

Precio

59,530

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 7v

Tracción

AWD

Plazas

4 / 5 puertas

Maletero

535 L

Depósito

65 L

Potencia

150 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima204 CV / 150 kW
Par máximo280 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 7v

Capacidades

Depósito65 L
Maletero535 L

Análisis detallado del Audi A7 Sportback 2.8 FSI quattro S tronic 7 vel. · 204 CV (2010-2011)

Descripción general

El Audi A7 Sportback de 2011 irrumpió en el mercado como una declaración de intenciones, una sublime fusión entre la elegancia de un coupé, el confort de una berlina de lujo y la versatilidad de un cinco puertas. Esta versión 2.8 FSI con tracción quattro se presentaba como un punto de acceso equilibrado a una gama que redefinió el concepto de gran turismo, ofreciendo un vehículo que no solo transporta, sino que emociona y representa un estilo de vida sofisticado.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del A7 Sportback es una experiencia de serenidad y control. El motor V6 de 204 CV entrega su potencia de una forma suave y progresiva, sin brusquedad, ideal para largos viajes. La magia reside en la combinación de la caja S tronic de 7 velocidades, casi telepática en sus cambios, y la legendaria tracción quattro. Esta última transmite una sensación de seguridad inquebrantable, pegando el coche al asfalto en cualquier circunstancia y convirtiendo cada curva en un ejercicio de aplomo y confianza. No es un deportivo radical, sino un devorador de kilómetros que te aísla del mundo exterior en una burbuja de confort y refinamiento.

Diseño y estética

El diseño del A7 Sportback es, sencillamente, una obra de arte atemporal. Su silueta, marcada por una línea de techo descendente que fluye sin interrupción hasta un final abrupto y elegante, cautivó al mundo. Era una escultura en movimiento, con proporciones musculosas, puertas sin marco y un alerón trasero retráctil que añadía un toque de dramatismo. Por dentro, el habitáculo era un santuario de la calidad Audi: materiales exquisitos, ajustes milimétricos y un diseño minimalista y tecnológico que envolvía a los ocupantes en una atmósfera de lujo moderno y absoluto bienestar.

Tecnología y características

En su lanzamiento, el A7 era un escaparate tecnológico rodante. El sistema MMI con su pantalla retráctil que emergía del salpicadero era el centro neurálgico de un arsenal de innovaciones. Opcionales como el Head-Up Display, el control de crucero adaptativo con función Stop & Go o el asistente de visión nocturna lo situaban a la vanguardia de su segmento. La construcción ligera con un uso extensivo de aluminio y la eficiencia del sistema Start-Stop demostraban un compromiso con la ingeniería avanzada que iba más allá del puro lujo.

Competencia

El Audi A7 Sportback no llegó a un mercado vacío, pero sí lo redefinió. Su principal adversario fue el Mercedes-Benz CLS, el pionero del concepto de 'coupé de cuatro puertas'. También se enfrentó al BMW Serie 5 Gran Turismo, que compartía la idea de un portón trasero pero con un enfoque estético muy diferente. Aunque en una escala superior de precio, el Porsche Panamera también era un rival conceptual. Frente a ellos, el A7 esgrimía la tracción quattro como un argumento de seguridad y eficacia imbatible y una línea fastback que, para muchos, era la más pura y seductora.

Conclusión

El Audi A7 Sportback 2.8 FSI quattro es mucho más que un coche; es una experiencia sensorial y una declaración de principios. Representa el equilibrio perfecto entre una estética que enamora y una funcionalidad sorprendente, envuelto en una calidad de construcción superlativa. Es un gran turismo en el sentido más puro de la palabra, diseñado para hacer de cada viaje un placer, con la seguridad y la confianza como compañeros inseparables. Una máquina que, incluso una década después, sigue girando cabezas y transmitiendo una profunda sensación de excelencia y vanguardia.