Audi RS 6 Avant 5.0 TFSI V10 quattro tiptronic · 579 CV (2008-2010)

2009
Gasolina
AWD
Automático 6v
Audi A6 - Vista 1
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Audi A6 - Vista 3
Audi A6 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Audi A6

Potencia

579CV

Par

650Nm

Consumo

14l/100

Emisiones

333g/km

0-100 km/h

4.6s

Vel. Máx.

250km/h

Peso

2100kg

Precio

127,090

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 6v

Tracción

AWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

565 L

Depósito

80 L

Potencia

426 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima579 CV / 426 kW
Par máximo650 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 6v

Capacidades

Depósito80 L
Maletero565 L

Análisis detallado del Audi RS 6 Avant 5.0 TFSI V10 quattro tiptronic · 579 CV (2008-2010)

Descripción general

El Audi RS 6 Avant de la generación C6 no es un familiar cualquiera; es una leyenda forjada en Ingolstadt que esconde un corazón de superdeportivo. Presentado en una época donde la audacia mecánica no conocía límites, este modelo redefinió el concepto de 'station wagon' de altas prestaciones, ofreciendo una dualidad casi imposible: la practicidad de un coche para el día a día con la furia de un V10 biturbo. Es la máquina definitiva para quien se niega a elegir entre la familia y la adrenalina.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del RS 6 Avant es una experiencia visceral. El despertar del V10 es un rugido grave que promete emociones fuertes. Al pisar el acelerador, los 650 Nm de par te aplastan contra el asiento desde apenas 1500 rpm, una oleada de fuerza ininterrumpida que parece no tener fin. La aceleración es brutal, catapultando sus más de dos toneladas de 0 a 100 km/h en solo 4.6 segundos. A pesar de su tamaño, la tracción quattro transmite una confianza absoluta, permitiendo trazar curvas con una precisión y aplomo que desafían las leyes de la física. Es una sinfonía mecánica que combina la fuerza bruta con una sofisticación sorprendente.

Diseño y estética

Visualmente, el RS 6 Avant C6 es un atleta vestido con un traje a medida. Mantiene la elegante silueta del A6 Avant, pero la adereza con detalles que delatan su naturaleza salvaje. Los pasos de rueda ensanchados, el paragolpes delantero con sus enormes tomas de aire y la inconfundible zaga con su difusor y las dos salidas de escape ovaladas, son una declaración de intenciones. No es un diseño estridente, sino una demostración de poder contenido, una musculatura funcional que inspira respeto y admiración sin necesidad de gritarlo.

Tecnología y características

La joya de la corona es, sin duda, su motor V10 de 5.0 litros con inyección directa FSI y doble turbocompresor, una obra de ingeniería que entregaba 579 caballos de potencia. Esta proeza mecánica se gestionaba a través de una transmisión Tiptronic de seis velocidades, recalibrada para soportar el torrente de par, y se transmitía al asfalto mediante el legendario sistema de tracción total quattro. Este conjunto tecnológico permitía que un vehículo de su peso y tamaño ofreciera un rendimiento que rivalizaba con los superdeportivos más exóticos de su tiempo.

Competencia

En el exclusivo olimpo de los familiares superdeportivos, el RS 6 Avant se enfrentó a titanes de la ingeniería alemana. Su rival más directo fue el BMW M5 Touring (E61), con su aclamado motor V10 atmosférico, que ofrecía una experiencia de conducción diferente, más puntiaguda. Por otro lado, el Mercedes-Benz E 63 AMG Estate oponía la fuerza bruta de su V8 de gran cilindrada. Frente a ellos, el Audi destacaba por su tracción total quattro, que le otorgaba una ventaja decisiva en motricidad y seguridad en cualquier circunstancia.

Conclusión

El Audi RS 6 Avant V10 es mucho más que un coche rápido; es el cénit de una era, un monumento al exceso de la ingeniería antes de la llegada del downsizing. Representa la máxima expresión del 'lobo con piel de cordero', un vehículo capaz de llevar a la familia de vacaciones y, al mismo tiempo, humillar a deportivos de pura cepa. Su combinación de un motor legendario, una estética imponente pero discreta y una versatilidad inigualable lo convierten en un icono cuyo rugido de diez cilindros resonará para siempre en la memoria de los aficionados.