Audi A4 allroad quattro 3.0 TDI DPF 240 CV S tronic 7 vel. (2009-2010)

2009
Gasóleo
AWD
Automático 7v
Audi A4 - Vista 1
Audi A4 - Vista 2
Audi A4 - Vista 3
Audi A4 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Audi A4

Potencia

239CV

Par

500Nm

Consumo

7.1l/100

Emisiones

189g/km

0-100 km/h

6.4s

Vel. Máx.

236km/h

Peso

1840kg

Precio

50,170

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Automático 7v

Tracción

AWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

490 L

Depósito

64 L

Potencia

176 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima239 CV / 176 kW
Par máximo500 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónAutomático 7v

Capacidades

Depósito64 L
Maletero490 L

Análisis detallado del Audi A4 allroad quattro 3.0 TDI DPF 240 CV S tronic 7 vel. (2009-2010)

Descripción general

El Audi A4 allroad quattro de 2009 no es simplemente una ranchera más; es una declaración de intenciones. Nace de la fusión entre la elegancia de una berlina A4 y el espíritu aventurero de un todocamino, creando un vehículo único capaz de llevarte con el mismo aplomo a una reunión de negocios o a un refugio perdido en la montaña. Con su potente motor diésel V6 y la legendaria tracción quattro, este coche promete un mundo de posibilidades sin renunciar al confort y la calidad que definen a Audi.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del A4 allroad 3.0 TDI es una experiencia que inunda los sentidos. El empuje de su motor V6 de 240 CV es instantáneo y abrumador, gracias a unos colosales 500 Nm de par disponibles desde apenas 1500 revoluciones. Cada aceleración se siente como un impulso imparable, gestionado con una suavidad exquisita por el cambio S tronic de 7 velocidades. La tracción quattro te ancla al asfalto, transmitiendo una sensación de seguridad y control absolutos, incluso cuando el camino se complica. Es un coche que te hace sentir poderoso, seguro y capaz de llegar a cualquier destino con una facilidad pasmosa.

Diseño y estética

Visualmente, el A4 allroad es una obra de equilibrio perfecto. Su carrocería familiar se ve realzada por una mayor altura al suelo, protectores en los pasos de rueda y bajos, y una parrilla frontal con lamas verticales que le otorgan una presencia imponente y robusta. No es un disfraz, es la expresión de su doble naturaleza. Por dentro, te recibe la atmósfera de calidad suprema del A4, con materiales nobles, ajustes milimétricos y un diseño ergonómico que te hace sentir en casa desde el primer momento. Es un habitáculo que combina el lujo funcional con la promesa de durabilidad para cualquier aventura.

Tecnología y características

Bajo su piel se esconde una ingeniería de vanguardia para su época. El corazón de la bestia es el motor 3.0 TDI, una joya de la mecánica con inyección common-rail y turbo de geometría variable que ofrecía un rendimiento y una eficiencia extraordinarios. Este propulsor se asocia a la transmisión S tronic de doble embrague, una tecnología derivada de la competición que permitía cambios de marcha casi instantáneos. Y por supuesto, el sistema de tracción total permanente quattro, el alma del coche, capaz de distribuir la fuerza de forma inteligente para garantizar la máxima motricidad en todo momento. No es solo un coche, es una demostración de poderío tecnológico.

Competencia

En el momento de su lanzamiento, el Audi A4 allroad se movía en un territorio casi exclusivo. Su rival más directo era, sin duda, el Volvo XC70, otro familiar con vocación campera que apostaba más por el confort y la seguridad. También se enfrentaba al Subaru Outback, un pionero en este concepto que ofrecía una gran capacidad todoterreno pero con un enfoque menos premium. Frente a ellos, el Audi se distinguía por un dinamismo superior, un motor V6 de altísimas prestaciones y un nivel de lujo y acabados que lo situaban un escalón por encima, creando su propio nicho de mercado.

Conclusión

El Audi A4 allroad quattro 3.0 TDI es mucho más que la suma de sus partes. Es el compañero de vida ideal para quien busca un vehículo total, sin compromisos. Ofrece el espacio de un familiar, las prestaciones de un deportivo, el lujo de una berlina de representación y la capacidad para escapar de la rutina que solo un todocamino puede dar. Es un coche que emociona al conducirlo y enorgullece al poseerlo, una máquina soberbia que, incluso años después, sigue representando uno de los conceptos más inteligentes y deseables del mundo del automóvil.