Audi A3 3.2 quattro DSG Ambition · 250 CV (2004-2005)

2003
Gasolina
AWD
Automático 6v

Especificaciones y análisis del Audi A3

Potencia

250CV

Par

320Nm

Consumo

9.9l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

6.4s

Vel. Máx.

250km/h

Peso

1600kg

Precio

38,500

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 6v

Tracción

AWD

Plazas

5 / 3 puertas

Maletero

281 L

Depósito

60 L

Potencia

184 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima250 CV / 184 kW
Par máximo320 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 6v

Capacidades

Depósito60 L
Maletero281 L

Análisis detallado del Audi A3 3.2 quattro DSG Ambition · 250 CV (2004-2005)

Descripción general

El Audi A3 3.2 quattro DSG no es un compacto cualquiera; es una declaración de intenciones de principios de los 2000. En una carrocería discreta y elegante, Audi encapsuló el alma de un gran turismo, montando un glorioso motor V6 de 3.2 litros, una rareza exquisita en su segmento. Este coche representaba la simbiosis perfecta entre la versatilidad de un A3 y las prestaciones de un deportivo de alta gama, creando un vehículo que despertaba emociones intensas mucho antes de que la fiebre de los 'hot hatch' modernos se consolidara.

Experiencia de conducción

Conducir este A3 es una experiencia visceral que te transporta a otra época. El protagonista absoluto es el motor V6, cuyo sonido es una melodía grave y adictiva que se intensifica a medida que la aguja sube hasta las 6300 rpm. La entrega de potencia es lineal, contundente y sin el retardo de los turbos modernos. La revolucionaria caja de cambios DSG de doble embrague, pionera en su día, ofrece cambios de marcha instantáneos que te pegan al asiento, mientras que la tracción integral quattro te ancla al asfalto con una seguridad abrumadora. Es una máquina que te invita a disfrutar de cada curva, transmitiendo una sensación de solidez, aplomo y pura potencia que enamora.

Diseño y estética

El diseño del Audi A3 de segunda generación es una obra maestra de elegancia atemporal. Sus líneas, limpias y proporcionadas, le confieren una presencia musculosa pero sobria, que ha envejecido con una dignidad excepcional. La carrocería de tres puertas acentúa su perfil deportivo, mientras que detalles como las llantas de 17 pulgadas y la doble salida de escape insinúan sutilmente los 250 caballos que esconde. Por dentro, la calidad es la que se espera de Audi: materiales nobles, ajustes milimétricos y una ergonomía perfecta que te envuelven en una atmósfera premium y confortable, donde cada viaje se siente especial.

Tecnología y características

Este modelo fue un escaparate tecnológico para Audi. La combinación de un motor V6 atmosférico con la innovadora transmisión DSG de seis velocidades fue un hito, ofreciendo una rapidez y eficacia nunca vistas en un coche de su clase. El sistema de tracción total quattro, basado en un embrague Haldex, garantizaba una motricidad impecable en cualquier circunstancia, permitiendo explotar todo el potencial del motor con total confianza. Además, su chasis con suspensión trasera de paralelogramo deformable le otorgaba un equilibrio soberbio entre confort de marcha y agilidad dinámica, situándolo por encima de la mayoría de sus contemporáneos.

Competencia

En su época, el A3 3.2 quattro se medía con una élite muy selecta de compactos de altas prestaciones. Su rival más directo y hermano de plataforma era el Volkswagen Golf R32, con quien compartía su corazón mecánico. Otro gran contendiente fue el BMW 130i, que ofrecía una propuesta purista con su motor de seis cilindros en línea y tracción trasera. Tampoco podemos olvidar al pasional Alfa Romeo 147 GTA, un V6 italiano de tracción delantera que apostaba todo al carácter y al diseño. Cada uno ofrecía una interpretación única del compacto deportivo premium.

Conclusión

El Audi A3 3.2 quattro DSG es mucho más que un coche rápido; es una pieza de ingeniería para coleccionistas y amantes de la conducción. Representa el cénit de una era en la que el sonido, el tacto y el carácter de un gran motor atmosférico eran el alma de un deportivo. Hoy, se erige como un futuro clásico, un vehículo que ofrece sensaciones puras y mecánicas que son difíciles de encontrar en la actualidad. Es la mezcla perfecta de discreción, calidad, prestaciones y un sonido que pone la piel de gallina, un coche para ser disfrutado y atesorado.