Especificaciones y análisis del Aston Martin DBS
Potencia
517CV
Par
570Nm
Consumo
15.5l/100
Emisiones
367g/km
0-100 km/h
4.3s
Vel. Máx.
295km/h
Peso
1810kg
Precio
281,524€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 6v
RWD
2 / 2 puertas
- L
78 L
380 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Aston Martin DBS Touchtronic II · 517 CV (2009-2010)
Descripción general
El Aston Martin DBS de 2009 no es simplemente un coche, es la encarnación del Gran Turismo británico en su máxima expresión. Heredero de un linaje legendario y popularizado en la gran pantalla, este coupé combina una elegancia atemporal con la fuerza bruta de su corazón, un majestuoso motor V12 de 5.9 litros que entrega 517 caballos de pura emoción. Es una declaración de intenciones, una obra de arte diseñada para devorar continentes con estilo y una banda sonora inolvidable.
Experiencia de conducción
Poner en marcha el DBS es despertar a una bestia. El rugido inicial del V12 es una promesa de lo que está por venir: una aceleración visceral que te pega al asiento, alcanzando los 100 km/h en solo 4.3 segundos. Cada cambio de la transmisión Touchtronic II es un evento, cada curva una conversación entre el conductor, el chasis y el asfalto. No es un coche que simplemente se conduce, se siente. La conexión es analógica, pura, una experiencia cada vez más rara que eriza la piel y acelera el pulso mucho antes de acercarse a su límite.
Diseño y estética
Su silueta es una obra maestra de la proporción y la agresividad contenida. Basado en el ya hermoso DB9, el DBS esculpe sus músculos con el uso extensivo de fibra de carbono en el capó, el difusor y otros apéndices aerodinámicos. Las líneas fluidas y elegantes contrastan con las tomas de aire ensanchadas y una postura más baja y decidida. Es la perfecta dualidad entre un caballero con traje a medida y un atleta de élite listo para la acción. Un diseño que, más de una década después, sigue girando cabezas y provocando suspiros.
Tecnología y características
En su época, el DBS representaba un notable despliegue tecnológico enfocado en el rendimiento. Su chasis de aluminio unido, la suspensión adaptativa (Adaptive Damping System) y los imponentes frenos carbonocerámicos de serie eran tecnología derivada directamente de la competición. La transmisión automática 'Touchtronic II' de 6 velocidades permitía un control manual secuencial que, sin ser tan rápido como las cajas de doble embrague posteriores, ofrecía una conexión mecánica y gratificante con el poderoso motor V12.
Competencia
En el olimpo de los grandes turismos de altas prestaciones, el DBS se enfrentó a titanes legendarios. Su rival más directo fue el Ferrari 599 GTB Fiorano, otro V12 de motor delantero que representaba la pasión italiana. También competía en espíritu con el Lamborghini Murciélago, aunque este último jugaba en la liga de los superdeportivos puros. Desde una perspectiva más lujosa, el Bentley Continental GT Speed ofrecía una alternativa británica, aunque con un enfoque mucho mayor en el confort que en la deportividad radical del Aston Martin.
Conclusión
El Aston Martin DBS es mucho más que la suma de sus partes. Es uno de los últimos estandartes de una era dorada: la del motor V12 atmosférico, grande y escandaloso. Es un coche con alma, un compañero de viaje que recompensa con sensaciones puras y un carácter inigualable. Poseerlo no es una decisión racional, es un acto de pasión por la belleza, el sonido y la emoción de la conducción en su estado más puro. Una joya atemporal que representa el cénit de una forma de entender el automóvil.