Aston Martin Cygnet · 98 CV (2011-2012)

2011
Gasolina
FWD
Manual 6v
Aston Martin Cygnet - Vista 1
Aston Martin Cygnet - Vista 2
Aston Martin Cygnet - Vista 3
Aston Martin Cygnet - Vista 4

Especificaciones y análisis del Aston Martin Cygnet

Potencia

98CV

Par

123Nm

Consumo

5l/100

Emisiones

116g/km

0-100 km/h

11.8s

Vel. Máx.

170km/h

Peso

-kg

Precio

39,959

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 6v

Tracción

FWD

Plazas

4 / 3 puertas

Maletero

- L

Depósito

- L

Potencia

72 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima98 CV / 72 kW
Par máximo123 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito0 L
Maletero0 L

Análisis detallado del Aston Martin Cygnet · 98 CV (2011-2012)

Descripción general

El Aston Martin Cygnet es uno de los experimentos más audaces y controvertidos de la historia del automóvil. Nacido de la necesidad de reducir las emisiones medias de la flota, Aston Martin tomó la base de un fiable Toyota iQ y lo vistió con el alma y el lujo de la marca británica. No es un coche, es una declaración de intenciones, una pieza de alta costura urbana que desafió todas las convenciones y que, aún hoy, despierta pasiones y debates encendidos.

Experiencia de conducción

Al volante, el Cygnet ofrece una dualidad fascinante. Por un lado, sientes la agilidad y la facilidad de un coche urbano puro, perfecto para deslizarse por el tráfico y aparcar en espacios imposibles. Su motor de 98 caballos, de origen Toyota, es voluntarioso y eficiente, y la caja de cambios manual de seis velocidades añade un toque de conexión que se agradece. Pero la verdadera sensación proviene del entorno: el olor del cuero cosido a mano, el tacto de los materiales nobles y la visión del icónico emblema alado en el volante. Es la extraña y maravillosa sensación de conducir un utilitario con el corazón y el refinamiento de un Gran Turismo.

Diseño y estética

El diseño es un choque de mundos magistralmente ejecutado. En el exterior, la silueta compacta del iQ se transforma con la inconfundible parrilla de Aston Martin, las branquias laterales y unas ópticas rediseñadas que le otorgan una personalidad única y aristocrática. Sin embargo, es en el interior donde la magia ocurre. El habitáculo, completamente rehecho a mano en Gaydon, es un santuario de lujo. Cada superficie está cubierta del mejor cuero y Alcantara, creando un ambiente opulento y acogedor que te hace olvidar por completo sus humildes orígenes y te transporta al exclusivo universo de Aston Martin.

Tecnología y características

La base tecnológica del Cygnet es la del Toyota iQ, lo que se traduce en una ingeniería japonesa probada y extraordinariamente fiable. El motor 1.33 Dual VVT-i es un ejemplo de eficiencia y suavidad para su época, cumpliendo con la normativa Euro 5. No encontrarás las innovaciones de vanguardia de sus hermanos mayores, pero sí una base mecánica sólida y un equipamiento correcto para la vida en la ciudad, incluyendo dirección asistida eléctrica y todos los elementos de seguridad necesarios. La verdadera proeza tecnológica no es electrónica, sino conceptual: la fusión de la fiabilidad japonesa con la artesanía británica.

Competencia

El Aston Martin Cygnet existió en una categoría propia, sin rivales directos. Por precio, se enfrentaba a compactos deportivos como un Audi A1 bien equipado o un Mini John Cooper Works, coches mucho más potentes y espaciosos. Por concepto, podría compararse con un Smart Fortwo Brabus, pero el nivel de lujo y exclusividad del Cygnet estaba en otra galaxia. Su verdadero competidor era el propio Toyota iQ, que ofrecía la misma practicidad por una fracción de su coste. El Cygnet no competía contra otros coches, sino contra otros objetos de lujo: un reloj suizo, un bolso de diseño o una escapada de fin de semana.

Conclusión

El Cygnet fue un fracaso comercial pero un éxito conceptual que hoy se ha convertido en un objeto de culto. Fue una solución brillante y atrevida a un problema normativo, un coche que demostró que el lujo no entiende de tamaños. Conducir un Cygnet es una experiencia única, un guiño cómplice para entendidos que valoran la rareza, la historia y la audacia por encima de las cifras de potencia. Es la paradoja sobre ruedas más elegante jamás creada, un pequeño Aston Martin con una historia inmensa que contar.