Abarth 595 Turismo 1.4 16v T-JET 121 kW (165 CV) Cambio Secuencial Robotizado · 165 CV (2018-2021)

2016
Gasolina
FWD
Automático 5v
Abarth 595 - Vista 1
Abarth 595 - Vista 2
Abarth 595 - Vista 3
Abarth 595 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Abarth 595

Potencia

165CV

Par

230Nm

Consumo

7.3l/100

Emisiones

164g/km

0-100 km/h

7.4s

Vel. Máx.

218km/h

Peso

1120kg

Precio

28,450

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 5v

Tracción

FWD

Plazas

4 / 3 puertas

Maletero

185 L

Depósito

35 L

Potencia

121 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima165 CV / 121 kW
Par máximo230 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito35 L
Maletero185 L

Análisis detallado del Abarth 595 Turismo 1.4 16v T-JET 121 kW (165 CV) Cambio Secuencial Robotizado · 165 CV (2018-2021)

Descripción general

El Abarth 595 Turismo es la encarnación del veneno del escorpión en un frasco pequeño. Partiendo de la icónica y amable figura del Fiat 500, Abarth inyecta una dosis masiva de adrenalina y carácter para crear un coche que no deja a nadie indiferente. Con su motor 1.4 T-JET de 165 caballos, este pequeño deportivo no es un simple medio de transporte, es una declaración de intenciones, una máquina diseñada para despertar emociones y convertir cada trayecto en una experiencia memorable.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del 595 Turismo es una sobrecarga sensorial. El rugido del motor al arrancar, profundo y desproporcionado para su tamaño, te anticipa lo que está por venir. La suspensión es firme, comunicando cada imperfección del asfalto directamente a tu espalda, pero es precisamente esa conexión la que te hace sentir vivo. Al presionar el acelerador, los 165 CV te pegan al asiento con una ferocidad inesperada, mientras el silbido del turbo y el petardeo del escape componen una banda sonora adictiva. El cambio secuencial robotizado, con sus transiciones marcadas y algo bruscas, te hace partícipe de la conducción, exigiendo tu atención y recompensándote con una sensación de coche de carreras que pocos vehículos modernos pueden igualar.

Diseño y estética

Su estética es un perfecto equilibrio entre la nostalgia y la agresividad. Mantiene las simpáticas líneas redondeadas del 500, pero las adorna con paragolpes ensanchados, llantas de 17 pulgadas que llenan los pasos de rueda, un difusor trasero y, por supuesto, los emblemas del escorpión. Cada detalle grita 'rendimiento'. Por dentro, el ambiente de competición continúa con unos asientos que abrazan el cuerpo, un volante deportivo y el manómetro de la presión del turbo presidiendo el salpicadero. Es un diseño que no pide permiso, que se enorgullece de su herencia y de su propósito: ser un objeto de deseo y diversión.

Tecnología y características

La tecnología en el Abarth 595 no se centra en asistencias a la conducción o en lujos superfluos, sino en potenciar la experiencia al volante. El botón 'Sport' transforma el carácter del coche, avivando la respuesta del motor y endureciendo la dirección para un tacto más directo. El sistema TTC (Torque Transfer Control) actúa como un diferencial autoblocante electrónico, mejorando la tracción a la salida de las curvas lentas y permitiéndote exprimir todo el potencial del chasis. La pantalla del sistema Uconnect cumple con las necesidades de infoentretenimiento, pero la verdadera tecnología que define a este coche es la que sientes: la que te conecta de forma pura y mecánica con la carretera.

Competencia

Encontrar un rival directo para el Abarth 595 es complicado por su singularidad. El MINI Cooper S ofrece un nivel de potencia similar y una conducción ágil, pero con un enfoque más refinado y burgués, careciendo de la crudeza pasional del italiano. El Ford Fiesta ST, aunque más grande y práctico, comparte su espíritu juguetón y es un referente en dinamismo, pero no tiene el mismo carisma estético ni el sonido embriagador del Abarth. Quizás su mayor rival es él mismo en sus versiones más potentes, pero en su nicho de 'pocket rocket' con alma italiana, juega en una liga propia.

Conclusión

El Abarth 595 Turismo es un coche que se compra con el corazón, no con la cabeza. Es pequeño, es firme y su practicidad es limitada. Sin embargo, todo eso se olvida en el instante en que giras la llave y su motor cobra vida. Es un antídoto contra el aburrimiento, un generador de sonrisas constante que te recuerda por qué te apasiona conducir. Para quien busque un segundo coche de disfrute o simplemente quiera que cada día se sienta como una etapa de un rally, este pequeño escorpión ofrece una de las experiencias más puras y emocionantes del mercado.