Abarth 595 Esseesse 1.4 16v T-JET 132 kW (180 CV) Cambio Secuencial Robotizado · 179 CV (2019-2021)

2016
Gasolina
FWD
Automático 5v
Abarth 595 - Vista 1
Abarth 595 - Vista 2
Abarth 595 - Vista 3
Abarth 595 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Abarth 595

Potencia

179CV

Par

250Nm

Consumo

7.8l/100

Emisiones

172g/km

0-100 km/h

6.7s

Vel. Máx.

225km/h

Peso

1120kg

Precio

33,750

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 5v

Tracción

FWD

Plazas

4 / 3 puertas

Maletero

185 L

Depósito

35 L

Potencia

132 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima179 CV / 132 kW
Par máximo250 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito35 L
Maletero185 L

Análisis detallado del Abarth 595 Esseesse 1.4 16v T-JET 132 kW (180 CV) Cambio Secuencial Robotizado · 179 CV (2019-2021)

Descripción general

El Abarth 595 Esseesse no es simplemente un coche, es una declaración de intenciones. Heredero directo del espíritu de Karl Abarth, este pequeño escorpión toma la base de un Fiat 500 y la transforma en una máquina de pura adrenalina. Con su motor 1.4 T-JET de 180 caballos y un carácter explosivo, este vehículo promete una experiencia de conducción visceral y adictiva, un auténtico juguete para adultos que buscan emociones fuertes en cada trayecto.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del 595 Esseesse es despertar los sentidos. El rugido del escape inunda el habitáculo y anuncia lo que está por venir. La aceleración es brutal, pegándote al asiento gracias a sus 180 CV y un peso de apenas 1120 kg, logrando el 0 a 100 km/h en solo 6.7 segundos. Su chasis rígido y su corta distancia entre ejes lo convierten en un kart matriculable, con una agilidad endiablada en curvas. La suspensión es firme, comunicando cada imperfección del asfalto, y la dirección es rápida y precisa. El cambio secuencial robotizado, con sus transiciones marcadas, te hace sentir como un piloto, exigiendo tu implicación y recompensándote con una conexión mecánica que pocos coches modernos pueden ofrecer.

Diseño y estética

Su estética es tan provocadora como su conducción. El diseño del Abarth 595 Esseesse es una mezcla perfecta de la simpatía retro del Fiat 500 con una agresividad descarada. Los paragolpes ensanchados, las llantas de 17 pulgadas, el imponente difusor trasero y los detalles específicos no dejan lugar a dudas: es un coche de carreras para la calle. Por dentro, el ambiente es igualmente deportivo, con espectaculares asientos que te abrazan en las curvas y un salpicadero que combina funcionalidad con detalles racing. Es un coche pequeño, íntimo y diseñado para el disfrute del conductor, donde la forma sigue a la función de la manera más pasional posible.

Tecnología y características

La tecnología en el Abarth 595 Esseesse está al servicio exclusivo del rendimiento. El corazón es el motor 1.4 T-JET, una mecánica probada y exprimida al máximo con un gran turbo para entregar una potencia contundente. No encontrarás un arsenal de asistencias a la conducción; aquí el protagonista eres tú. El sistema de infoentretenimiento cumple su función sin alardes, porque la verdadera sinfonía tecnológica proviene del motor y del escape. El cambio secuencial robotizado es un ejemplo de esta filosofía: una tecnología con años en el mercado pero que aporta un carácter mecánico y una interacción que las modernas cajas de doble embrague han suavizado en exceso.

Competencia

En el exclusivo club de los pequeños deportivos, el Abarth 595 Esseesse se enfrenta a rivales como el Ford Fiesta ST, el MINI Cooper S o el Volkswagen Polo GTI. Mientras que el Fiesta ST destaca por un chasis excepcional y el Polo GTI por su equilibrio y refinamiento, el Abarth juega en su propia liga: la de la pasión pura. Es menos práctico, más ruidoso y más exigente que sus competidores, pero ninguno puede igualar su arrolladora personalidad ni su capacidad para convertir cada desplazamiento en un evento especial. Es la elección del corazón, no de la razón.

Conclusión

El Abarth 595 Esseesse es un coche imperfecto y, precisamente por eso, maravilloso. Es un antídoto contra el aburrimiento automovilístico, una máquina que te exige, te habla y te recompensa con sensaciones puras y sin filtros. No es el coche más cómodo, ni el más espacioso, ni el más avanzado, pero es uno de los pocos que puede hacerte sonreír de oreja a oreja en un simple trayecto corto. Es una compra puramente emocional, destinada a quien valora la experiencia de conducir por encima de todo lo demás. Un futuro clásico que celebra la alegría de la velocidad en su formato más concentrado.