Abarth 695 XSR Yamaha 1.4 16v T-JET 165 CV Cambio Secuencial Robotizado (2017-2018)

2016
Gasolina
FWD
Automático 5v
Abarth 595 - Vista 1
Abarth 595 - Vista 2
Abarth 595 - Vista 3
Abarth 595 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Abarth 595

Potencia

165CV

Par

230Nm

Consumo

5.8l/100

Emisiones

134g/km

0-100 km/h

7.4s

Vel. Máx.

218km/h

Peso

1120kg

Precio

28,650

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 5v

Tracción

FWD

Plazas

4 / 3 puertas

Maletero

185 L

Depósito

35 L

Potencia

121 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima165 CV / 121 kW
Par máximo230 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito35 L
Maletero185 L

Análisis detallado del Abarth 695 XSR Yamaha 1.4 16v T-JET 165 CV Cambio Secuencial Robotizado (2017-2018)

Descripción general

El Abarth 695 XSR Yamaha no es un coche cualquiera; es la materialización de una colaboración apasionante entre el escorpión de Abarth y el diapasón de Yamaha. Nacido en 2017, este pequeño misil de asfalto es una edición especial que celebra la deportividad en su estado más puro, uniendo la agilidad de un coche urbano con el alma de una motocicleta de competición. Es una declaración de intenciones, un objeto de deseo para quienes buscan emociones fuertes en un formato compacto y exclusivo.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del 695 XSR es una experiencia visceral. Sus 165 caballos, extraídos del enérgico motor 1.4 T-JET, te pegan al asiento con una contundencia que sorprende. El rugido del escape, probablemente un Akrapovič como es habitual en estas ediciones, es una banda sonora adictiva que te incita a explorar el límite de las 5500 rpm. Cada cambio de la transmisión secuencial robotizada es un golpe seco y mecánico que te conecta con la máquina, mientras que su chasis corto y su peso pluma de 1120 kg lo convierten en un demonio de las curvas. No es un coche, es una inyección de adrenalina con cada pisotón al acelerador.

Diseño y estética

Su estética es un grito de guerra. Basado en el icónico Fiat 500, el Abarth lo transforma en una bestia musculosa y compacta. La edición XSR Yamaha acentúa su carácter con detalles exclusivos que evocan el mundo de las dos ruedas. Las llantas de 17 pulgadas, los paragolpes ensanchados y el prominente alerón trasero no son mero adorno; son la promesa de un rendimiento excepcional. Por dentro, el ambiente de carreras continúa con asientos deportivos y el inconfundible escorpión recordándote que no estás en un coche convencional.

Tecnología y características

La tecnología en el Abarth 695 XSR está al servicio de una única causa: el rendimiento. El corazón es el motor 1.4 T-JET con inyección indirecta, turbo e intercooler, una joya de la ingeniería italiana optimizada para entregar 230 Nm de par. La transmisión secuencial robotizada de cinco velocidades ofrece una experiencia similar a la de un coche de carreras, aunque exige cierta adaptación. El chasis cuenta con una suspensión firme y frenos de disco ventilados de 284 mm en el eje delantero, garantizando un control preciso y una frenada potente. Es tecnología analógica en un mundo digital, centrada en la pureza de la conducción.

Competencia

En el exclusivo club de los pequeños deportivos, el Abarth 695 XSR se mide con rivales de la talla del MINI Cooper S o el Ford Fiesta ST de su época. Mientras que el MINI ofrece un tacto más premium y refinado y el Fiesta ST destaca por un chasis extraordinariamente eficaz, el Abarth juega en su propia liga. Ninguno puede igualar su carácter italiano descarado, su sonido embriagador ni la sensación de exclusividad que emana de su diseño y su herencia de competición. Es una elección pasional frente a opciones quizás más racionales.

Conclusión

El Abarth 695 XSR Yamaha es un capricho maravilloso, una oda a la conducción más pura y emocionante. No es el coche más práctico, ni el más cómodo, y su precio de casi 29.000 euros en su día lo posicionaba como un artículo de lujo. Sin embargo, lo que ofrece a cambio es algo que el dinero raramente puede comprar: carácter, alma y una capacidad inigualable para dibujar una sonrisa en tu rostro en cada trayecto. Es un futuro clásico, una pieza de coleccionista para quien entiende que un coche puede ser mucho más que un simple medio de transporte.