Abarth 500 1.4 16v T-JET 135 CV (2015-2016)

2009
Gasolina
FWD
Manual 5v
Abarth 500 - Vista 1
Abarth 500 - Vista 2
Abarth 500 - Vista 3
Abarth 500 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Abarth 500

Potencia

135CV

Par

206Nm

Consumo

6l/100

Emisiones

139g/km

0-100 km/h

7.9s

Vel. Máx.

205km/h

Peso

1110kg

Precio

17,495

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

4 / 3 puertas

Maletero

185 L

Depósito

35 L

Potencia

99 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima135 CV / 99 kW
Par máximo206 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito35 L
Maletero185 L

Análisis detallado del Abarth 500 1.4 16v T-JET 135 CV (2015-2016)

Descripción general

El Abarth 500 de 2015 no es simplemente un coche pequeño, es una declaración de intenciones. Tomando como base el icónico Fiat 500, la marca del escorpión inyecta una dosis masiva de veneno y deportividad para crear un auténtico 'pocket rocket'. Con su motor 1.4 T-JET de 135 caballos, este pequeño bólido nació con un único propósito: dibujar una sonrisa en la cara de quien lo conduce en cada curva y cada aceleración.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del Abarth 500 es una experiencia visceral. El sonido ronco del escape te envuelve desde el primer instante, una promesa de la diversión que está por venir. Su corta batalla y su suspensión firme te conectan directamente con el asfalto, sintiendo cada textura de la carretera. La aceleración, aunque sus 7.9 segundos de 0 a 100 km/h no parezcan estratosféricos en papel, se siente brutal en un chasis tan ligero y compacto. Es un coche nervioso, ágil y tremendamente reactivo, que pide ser conducido con pasión, recompensándote con una sensación de velocidad y control que pocos coches de su tamaño pueden igualar.

Diseño y estética

Visualmente, el Abarth 500 es una obra de arte que combina la simpatía del diseño original con una agresividad puramente deportiva. Los paragolpes ensanchados, las taloneras, el difusor trasero con su doble salida de escape y las llantas de 16 pulgadas no dejan lugar a dudas sobre su naturaleza. Los logotipos del escorpión reemplazan a los de Fiat, marcando su territorio. Por dentro, el ambiente de carreras continúa con unos asientos que abrazan el cuerpo, un volante deportivo y el icónico manómetro de la presión del turbo, un detalle que enamora y te sumerge por completo en su espíritu competitivo.

Tecnología y características

La tecnología en el Abarth 500 está al servicio de las prestaciones, no del confort. El corazón es su motor 1.4 T-JET, una joya de la ingeniería que combina un turbo e intercooler para ofrecer una respuesta enérgica y contundente. El sistema TTC (Torque Transfer Control) es clave, funcionando como un diferencial autoblocante electrónico para mejorar la motricidad a la salida de las curvas más cerradas. Además, el modo 'Sport' transforma el carácter del coche, agudizando la respuesta del acelerador y endureciendo la dirección para un tacto aún más directo y emocionante.

Competencia

En su época, este pequeño escorpión se enfrentaba a rivales como el Ford Fiesta ST o el MINI Cooper S. Mientras que sus competidores podían ofrecer más espacio, refinamiento o un equipamiento más completo, el Abarth 500 jugaba en su propia liga: la de la emoción pura y el carácter. Su propuesta no era la más racional, sino la más pasional. Era más pequeño, más ruidoso y más radical, una elección hecha con el corazón para quienes buscaban una experiencia de conducción auténtica y sin filtros, con un inconfundible sabor italiano.

Conclusión

El Abarth 500 es un coche que se ama o no se entiende. Es impráctico, su suspensión es dura para el día a día y su espacio es limitado. Sin embargo, para el verdadero aficionado a la conducción, estas son simples anécdotas. Es un juguete maravilloso, una máquina de generar adrenalina y felicidad en formato de bolsillo. Representa la esencia de lo que debería ser un deportivo pequeño: ligero, ágil, ruidoso y, sobre todo, inmensamente divertido. Un futuro clásico que captura la pasión italiana por la velocidad.